Kalani vivía en el pacífico pueblo de Aurora, un lugar pintoresco rodeado de colinas verdes y ríos cristalinos. Aunque el paisaje era de ensueño, la mentalidad de sus habitantes no reflejaba la misma belleza. Aurora era un lugar donde la uniformidad era la norma, y las diferencias eran vistas con recelo y desconfianza. Las personas con diferentes tonos de piel, orientaciones sexuales, identidades de género o culturas eran marginadas, y la diversidad apenas se toleraba, mucho menos se celebraba.
Kalani, una joven de espíritu inquieto y mente curiosa, siempre se sintió fuera de lugar en Aurora. Su piel dorada, herencia de su abuela, la destacaba en un pueblo donde predominaban los tonos pálidos. Además, Kalani era una chica trans, lo cual era un concepto incomprensible para la mayoría de los habitantes de Aurora. Su curiosidad por el mundo exterior y su deseo de encontrar un lugar donde pudiera ser aceptada tal y como era la impulsaron a embarcarse en un viaje que cambiaría su vida y la de muchos otros.
Una mañana, con una mochila llena de provisiones y un corazón lleno de esperanza, Kalani se despidió de su familia. Sus padres, aunque preocupados, sabían que el deseo de Kalani de encontrar su lugar en el mundo era más fuerte que cualquier miedo. “Recuerda, hija,” le dijo su madre, “no importa cuán lejos vayas, siempre serás bienvenida en casa.”
Con una última mirada al pueblo que conocía desde su nacimiento, Kalani emprendió su viaje. Sabía que habría desafíos en el camino, pero estaba decidida a encontrar la armonía en la diversidad que tanto anhelaba.
ESTÁS LEYENDO
El gran viaje de Kalani
Adventure"Kalani era una jovencita trans que creció en un pueblo de mente cerrada. No dudarían en señalar y juzgar a cualquiera que fuera diferente a ellos. Gracias a eso ella un día decidió simplemente tomar su mochila y embarcarse en un viaje para descubri...