La primera consulta prenatal de House se podría decir que fue un poco complicada, Cuddy no pudo hacer mucho con solo unos cuantos equipos que podía contrabandear entre los consultorios, le era necesario que fuera obligatoriamente el omega a una verdadera consulta y no a un intento de ello. Necesitaba engatusar al dichoso con el objetivo de que fuera sin sentirse obligado.
— House, necesito que vayas a una consulta prenatal verdadera — Expresó con seriedad la alfa — Sé que no quieres que se descubra esto, pero el primer trimestre es importante para tu hijo — Comenzó a recordar entre sus memorias la información que recopilo a lo largo de sus años como estudiante de medicina
— Yo igual fui a la escuela de medicina si no recuerdas eso — Hablo con un tono de voz burlona mientras que seguía acostado en la camilla — Solo agéndame una cita en una hora que no haya tanta gente en el hospital — Dijo derrotado, todo lo hacía por su bebé
"Fue más fácil de lo que imagine" Pensó Cuddy
— Díganme cuando quedaría la consulta, yo la anotaré para recordarle a House de ello — Comento Chase que andaba cerca de la puerta del consultorio — Lo anotaré en mi libreta de bolsillo que siempre traigo en mi bata — Al decir lo último con una pizca de orgullo, empezó a tocar su bolsillo de la bata donde supuestamente debería estar su libreta
Libreta que no sentía en su bolsillo...
Con el fin de no verse atrapado dejo de seguir tocando su bolsillo y actuó como si nada; ahora que sabía que su libreta estaba perdida necesitaba encontrarla antes de que House llegara a dudar de él.
— Saldré primero yo para que no sospechen, luego voy a su oficina, decana para que me diga la cita, nos vemos luego House — Una excusa perfecta para su escapada
Después de decir eso, agarro la cerradura y la giro para abrir la puerta. Sin dejar que se notara nervioso antes de volver a cerrar les sonrió a los otros dos.
Había muchas emociones que querían salir de su cuerpo en estos instantes, las manos que mayormente las tiene quietas para poder trabajar con precisión en sus pacientes, ahora le temblaban, además estaba comenzó a sudar a mares mientras que las palmas de sus manos se empezaban a volver frías.
Era solamente una tarea que realizaba, una que consistía en cuidar a su jefe embarazado y él lo arruinó. No le afectaría si hubiera sido por obligación, sin embargo, él se ofreció en bandeja de plata con la finalidad de querer estar cerca de este proceso de House y de su ahora proclamado hermanito.
O bueno, más bien fue un pequeño descuido por parte de él al querer seguir a House con entusiasmo a la consulta con Cuddy. Si se ponía a pensar en todos los sitios donde anduvo antes de la consulta, podría con éxito encontrar su pertenencia sin que nadie más lo descubriera. Emprendió su caminata al elevador, no podía ser que se le hubiera perdido en el primero piso, puesto que ya le habrían avisado sobre ello por la cantidad de gente que pasaba a diario. Tenía que buscar en un lugar anterior y eso era en la oficina de House.
Inhalo y exhalo cuando entro al elevador, lo último que necesitaba en estos momentos era que vieran su nerviosismo en su cuerpo entre los pasillos que caminaría.
Nunca se percató que una persona le había empezado a seguir desde la planta baja, era más su preocupación de su libretita que su sentido de supervivencia que lo paso a segundo plano solo para enfocarse en encontrar lo que perdió.
Estando a unos pocos pasos a llegar, sus pies se detuvieron de pronto cuando su sensible nariz olio un aroma que estaba estrictamente prohibida estar cerca de él y de House. Desde su interior comenzó a gruñir en advertencia, sabía que no era ético hacer esto a otra persona, a pesar de eso su cuerpo no opinaba lo mismo en presencia de aquel alfa.