Parte 1

146 17 0
                                    

¡ADVERTENCIA!

Esto es un lemon puro entre Marco y Eclipsa si no te gustan este tipo de cosas o este ship siente libre de no leer, si no es ese tu caso disfruta la lectura.

Era tarde en la noche, el reloj marcando ya las 1:20 a.m. cuando una pareja entro por un portal dimensional a tropezones ala casa de la Familia Díaz.

-Esa fue una fiesta increíble-, Menciono Marco con una gran sonrisa, sus mejillas rojas, y una esencia a alcohol se desprendía de él.

-Si Marco fue una fiesta increíble-, Respondió Eclipsa con una pequeña sonrisa en sus labios, y aunque sus mejillas estaban teñidas de un suave rojo por el alcohol, no estaba tan ebria como Marco.

Cuando por fin llegaron a la habitación de Marco a tropezones, cayeron pesadamente sobre la cama, compartiendo ambos una risa, la fiesta había sido sorprendentemente divertida, aun con el ambiente de incomodidad y pesimismo que había estado asediando a todos en el castillo, las últimas semanas.

Fue agradable que al menos una noche pudieran simplemente divertirse y pasarla genial.

Sin presión social, sin tristes recuerdos, sin miedo, simplemente fuera una noche agradable, para ellos dos, una noche necesaria. Y aunque al principio Marco se mostró que no quería participar, pero Eclipsa logro motivarlo a divertirse un poco.

Sabía muy bien de su estado de ánimo y el conflicto de sus emociones, por Star y su noviazgo con el joven Tom, el cual era su mejor amigo. No era una etapa fácil, por experiencia lo sabía.

Tus emociones se convierten en una pequeña, pero poderosa bomba, a punto de estallar en cualquier momento, fue igual que cuando describió su sexualidad, que lo que venía a su mente mientras exploraba su cuerpo no eran hombres sino monstruos.

Fue cuando Eclipsa se quedó pensando, buscaba imágenes de los hombres con los que ella había tenido contacto, el atractivo guardia de la entrada principal al salón de su madre (ex reina Solaria), el guapo y atractivo ayudante también de su madre, o el encantador aprendiz de cocinero.

Pero siempre al final su mente vagaba a los monstruos que había visto luchar con su madre, siempre altos, musculosos, con cicatrices de las difíciles vidas que llevaban, sus cuerpos a veces cubiertos de pelo o escamas.

Garras afiladas que podrían destrozarla fácilmente, como si de una hoja de papel se tratase, se imaginaba esas garras acariciándola, su larga lengua bífida lamiéndola, y siendo sometida, forzada, y entrega a los placeres carnales mas mundanos.

Pero ahora esos pensamientos, esos sentimientos se dirigían al chico moreno que estaba a su izquierda, transmitía un aura que muy pocas veces había sentido, alguien de buen corazón, lleno de dudas.

Eclipsa sabía que no tenía todas las respuestas a cualquier pregunta, sabía que no podía confiar en cualquiera, una lección que había aprendido por la mala.

Pronto la voz de Marco la saco de sus pensamientos

-¿Sabes algo? Eres muy hermosa-, Eclipsa sonríe maliciosamente, el alcohol era un demonio, pero era un demonio que ella conocía muy bien.

-Tú también eres muy atractivo, Marco-, Respondió Eclipsa con una suave sonrisa.

Empezó con un simple rose de sus manos, que poco a poco se convirtió en una suave caricia de mejilla, luego en un cálido abrazo para después convertirse en un simple beso, pero Eclipsa no quería eso, ella quería algo más apasionado.

-Eso es muy dulce Marco, pero ahora te voy a enseñar algo un poco más adulto- Dijo esto mientras volvía a juntar sus labios en un beso lleno de lujuria, la lujuria contenida de 300 años, Marco fue a profundizar el beso, pero Eclipsa no tardo nada en que su lengua se aventurara en la boca de Marco.

Deseos lujuriosos (Marco x Eclipsa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora