〘𝙰𝚚𝚞𝚎𝚕 𝚂𝚊𝚋𝚘𝚛〙[𝘽𝙞𝙡𝙡𝙮 𝙇𝙤𝙤𝙢𝙞𝙨 𝙭 𝙎𝙩𝙪 𝙈𝙖𝙘𝙝𝙚𝙧]

6- Te amo tanto~!/Pesadilla

Narrador: Stu Macher

Billy me acaba de probar... William Loomis me acaba de probar! Al principió dolió un poco pero comencé a acostumbrarme un poco, acariciando su cabello, hasta que un ruido nos sacó del trance, un rayo, grité y por reaccionar le di una bofetada a Billy

B.L: AH! Maldición Stu-!
S.M: Uh- lo siento —Me disculpé y inflingí presión en mí mano izquierda para que el sangrado se detuviera y no manchara mis  las sábanas que a mí opinión están ordenadas pero segun los demás no.

B.L: Iré por unas vendas —El dijo, y yo asentí, mirándolo salir del cuarto en silencio.

Me quedé ahí por unos minutos y miré mí mano, la marca del corte en mí pulgar estaba roja, pero no podía dejar de verla con aprecio, pues, era algo que a Billy le gustaba ¿No? Debería de ser compresivo.

Observé a Billy volver con Alcohol y vendas, se sentó a mí lado y tomó mí mano para echarle alcohol, solté un suave gemido, ardía, pero no importa, lo hice feliz.

B.L: Eso es, ya —Dijo, colocándome las vendas gentilmente y con cariño, creo, espero que si.

Narrador: Billy Loomis.

Miré la mano de Stu unos segundos y luego lo miré, tenía esa estúpida sonrisa en su caraz esa estúpida sonrisa que lo hacía ver lindo, miré a otro lado y me recosté para luego ser jalado por el, me atrajo a su pecho, escuché su corazón latir con regularidad, seguía bombeando, una vez escuché el corazón de mí papá detenerse varias veces el mismo día, me preocupaba? Pues si, era un niño, pero de echo, ahora no me importa, debería, es mí tutor legal, pero, ese imbecil no deja de revolcarse con cualquiera que se encuentre.

Cerré los ojos, sentía una sensación de tranquilidad, es extraño, siempre estoy en alerta, quiero decir, me gusta Stu, es mí novio pero jamás me había sentido relajado, será porque sigo algo ‘drogado’ si es que puedo llamarlo así? Abrí los ojos y eche un ligero vistazo a mí pantalón, no hay bulto, estoy sano, quiero decir, estaba sano antes, no era droga real, pero se sentía como una.

B.L: Oye...
S.M: ¿Si? —Me preguntó suavemente, abrazándome y recostando su cabeza contra la mía, sentí calor por unos momentos.
B.L: Sigo con hambre-
S.M: Ah...quieres que tome el cuchillo y me corte de nuevo?
B.L: No...yo...no se lo que quiero, solo- solo voy a dormir...
S.M: Está bien! Descansa
B.L: levantame cuando lleguen tus padres, para irme a casa.

El asintió y volví a cerrar los ojos, mí cuerpo dejó de estar tenso, y finalmente caí dormido, abrí los ojos otra vez, estaba en una habitación ordenada y limpia, algunas fotos en las paredes, estaban borrosas, okay, estoy en un sueño...un...extraño sueño, esta no es mí casa, ni la de Stu, ni la de Sidney...

Me levanté de la cama y comencé a caminar, había poca luz, al parecer era de noche, habían varios cuartos. Escuché un suave llanto tratando de ser calmado por una voz que no reconocía, una niña estaba llorando, traté de acercarme a ese cuarto pero una especie de barrera me jaló hacia atrás, odio no tener control de mis sueños. Gruñí y respiré hondo, tratando de pasar la barrera,y lo hice, llegué a una cocina, había un aroma putrefacto, como el de un cadáver, me acerqué a la olla con fuego bajo, efectivamente, un cadáver en salsa, tomé una cuchara y probé la salsa, salado.

Seguí caminando por la casa tratando de abrir puertas hasta que llegue a la del llanto, me detuve y traté de ver por la mirilla de la puerta pues tratar de entrar a una casa ajena de alguien que no conoces en un sueño podría espantarlos y espantarte a ti y podría darte un paro cardíaco.....juro que no lo inventé. Miré por la mirilla y el cuarto estaba oscuro, una pequeña lámpara iluminaba todo el cuarto, si no fuera por esa estúpida cabeza de un muerto podría ver mej- una cabeza, de un muerto, cubriendo la puerta. Golpeé suavemente para tirarlo y seguir viendo, funcionó con éxito, entonces vi a un hombre consolando a una niña pequeña, no logró diferenciar su rostro, abro gentilmente la puerta para ver el cadáver, lo veo, y entró en shock, observó el rastro de sangre hasta los zapatos del otro tipo, y ese tipo me mira a los ojos, sus ojos negros como el vacío, sus ojos negros como los míos.

Despierto, agitado, sin creer lo que acabo de ver, siento mis manos temblar, y Stu me habla.

S.M: Hey- hey calma calma! Estás bien-?

No logro articular palabras, solo lo miro y miro alrededor, me aferro a su pecho, escucho su corazón latir, nunca me asusté por un sueño, siempre creí que los que lo hacían eran imbéciles, además, soy William corazón de roca Loomis, claramente no me asusta ver el cadáver de Stu a medio comer en un sueño...

Yo...solo no quiero volver a dormir nunca...

Me levantó y abro la ventana.

B.L: Me-...Me tengo que ir- lo siento Stu-
S.M: Pero aún no han llegado mis padr-
B.L: LO SE, LO SE ¿OKAY? SOLAMENTE QUIERO IRME! —Grité sin reaccionar, me quedé en silencio y sentí algo recorrer mis mejillas, lágrimas, estaba llorando...

Sin dejarlo hablar salí de su casa, la tormenta esconderá mis lágrimas.

Billy Loomis NO llora...