•𝟎𝟏•

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-¿Ya te vas a ir a la despedida de soltero del rubio loco ese?- Preguntó Seungmin despertándose de su siesta la cual había durado toda la tarde.

-Sí, deja de hablarme que me estoy pintando los ojos y me va a salir mal por tu culpa, Minnie. -Contestó Minho ante el comentario de su compañero de piso.

-Claro, te tienes que ver sexy, pero lo único que se te va a acercar van a ser las moscas. -Rió el menor.

-Cállate, que tu llevas meses sin tener nada.

-Dijo el que no tiene sexo ni pagando. -Volvió a contestar el castaño en un tono más burlesco.

Minho miró al menor y ante tal comentario cogió papel del baño en el que se encontraba y siguió al contrario por toda la casa, con la intención de meterle dicho objeto en la boca.

-¡Min date prisa, llegaremos tarde!- Se oyó de repente mientras que el pelinegro tenía acorralado a su compañero a punto de meterle papel de baño por la boca.

-¡Ya voy, Chan! -Contestó gritando, pues el móvil se hallaba en el cuarto de baño.

Lee Minho procedió rápidamente a coger su móvil, llaves, cartera y un condón, intentando no hacer esperar demasiado a Bang Chan, el cual estaba abajo en la calle en su coche, listo para ir a la fiesta de soltero de Hyunjin.

-Pásalo bien, disfruta la noche. -Dijo Seungmin, mientras seguía riendo por lo ocurrido.

-Gracias tonto. Llegaré en la madrugada así que te jodes si te despierto.

-Bueno, pero no traigas a gente, ¿Eh? No quiero oír gemidos, sino me masturbaré. -Comentó en un tono más sarcástico.

-Está bien, chao. -Así, finalizando la conversación, por fin pudo bajar y montarse en el coche junto a su mejor amigo de la infancia.

En esa noche tan estrellada, aquel coche se paró frente a un hospital.

-¿Qué hacemos aquí?- Preguntó desconcertado Minho.

Bang Chan le explicó la situación; él debía visitar a Han Jisung, un chico el cual fue muy buen amigo de ambos cuando eran pequeños. Él padece de sida, y ese mismo día tuvo que ir a una revisión, pues por lo visto había algún tipo de desliz.

-Vivo con él, pero no he podido preguntarle antes. Es nada más para asegurarme de que todo está bien. -Dijo el australiano mirándolo. -Bájate, seguro que se alegra de verte. -Continuó con una amplia sonrisa.

Minho consiguió recordar quién era aquel sujeto; realmente fueron muy amigos, pero se separaron cuando el pelinegro se tuvo que mudar a otra ciudad. Supongo que no le importaría verlo ahora. En verdad, tenía curiosidad.

Ambos bajaron del coche, dirigiéndose hacia la puerta 143. Mientras iban por el pasillo, se oían voces de dos personas discutiendo sobre algo irrelevante.

-¿Pero me lo puedo tomar con cheesecake o no?

-Bueno, quizás sí.

-¡Pero diga sí o no! ¡Es usted muy ambiguo!

-¡Hannie!- Exclamó el pelirrojo entrando por la puerta.

-Oh, hola Channie. -Contestó ya más calmado y con una sonrisa. No tardó mucho en percatarse de que había otra persona inesperada en la sala, a quien no conseguía reconocer, pero se le hacía familiar su cara. -¿Quién es él?- Preguntó mirándolo.

-Es Lee Minho, ¿Recuerdas? Fuimos amigos cuando erámos más pequeños.

-Oh, creo recordarlo...

Pues claro que lo recordaba. Lee Minho fue su primer amor, tenía grabado ese nombre en su corazón. En un segundo, se le pasó por la cabeza todos aquellos momentos que vivieron, y sus sentimientos hacia él, los cuales ni siquiera entendía con esa corta edad. Se sorprendió al verlo. Estaba algo sonrojado, Minho era muy guapo, y le atraía su torso desnudo, pues llevaba un top. No podía creer lo increíble que él se veía. Lo que Han no sabía, es que Minho pensó lo mismo de él.

Minho se sentía algo raro. No sabía describirlo, pero sintió una especie de "conexión" casi inmediata con Han. ¿Era amor a primera vista? Sólo sabía que ahora él estaba rondando en su cabeza.

Tuvieron una agradable charla, muy corta, y fue entonces cuando los mayores se encaminaron al evento sin el chico de pelo azul, pues el médico le dijo que debía reposar, aunque este realmente quisiera haber asistido, no solía visitar sitios de ese estilo pero siempre le gustaría ver a hombres bailar casi sin ropa.

Fue una noche muy agradable. Ya un poco bebidos, fueron a dos clubs de strippers. Las carteras quedaron casi vacías, y el condón de Minho fue usado, aunque no por él. Todos disfrutaron del show, excepto Bang Chan, que era hetero y se fue temprano, pero de todas formas quiso ir a la fiesta de su gran amigo. Sin embargo, a Minho se le había quedado aquel sentimiento que tuvo con Jisung anteriormente aquel mismo día. Miraba a los trabajadores pasearse y coquetear con él, y por alguna razón, los comparaba con la belleza de Han y de alguna manera él estaba en su cabeza, recordando todas las veces que jugaron juntos con 9 años o cuando él iba a su casa y se quedaba a dormir. De esa forma, la noche finalizó.

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KADJAAKJ este es el primer cap cringe de la historia, gracias por leer, viva el minsung

Dedicado a Aroa ☺😘😍

𝙃𝙖𝙗𝙞𝙩𝙖𝙘𝙞𝙤́𝙣 143  ¬𝘮𝘪𝘯𝘴𝘶𝘯𝘨 ღ¬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora