—Debemos tener cuidado con lo que toquemos —dice Alegría—. Recuerden lo que pasó la última vez.
—Cierto —Desagrado mira la pantalla—
¡Un chico apuesto!Alegría rápidamente levanta la mirada para presenciar como Desagrado miraba sonriendo a un chico muy apuesto.
—¿Quien es ese? —pregunta Alegría.
—Es el capitán del equipo de fútbol. ¡Es guapísimo!
—¿"Capitán del equipo de fútbol"? ¿Por qué nunca lo vimos? —pregunta Alegría confundida.
—Se unió a esta escuela cuando Riley tenía 15, pero se fue a un intercambio extranjeros durante todo este año —explica Desagrado—. ¿Ya lo olvidaste?
—Oh.
—No me digas que enviaste todos esos recuerdos a largo plazo sin verlos.
—Puede que haya pasado. —ríe.
—De igual manera, Alegría tiene razón ese chico es raro. —dice Ansiedad.
—¡Tenemos que acercarnos a él! —grita Envidia.
Alegría solo muestra cara de asco para volverla una expresión calmada.
—Bueno es lindo sí, pero tenemos que ir ya a la práctica de Hockey. No hay tiempo para saludarlo.
Alegría estaba apunto de tocar la consola cuando está se volvió rosa.
•••
Riley corre hacia el chico, pero tropieza en el camino dándose un fuerte golpe.
•••
—¡Eso dolió! —mira la consola—. ¿Rosa? ¿Vergüenza? —mira al mencionado.
—Grandulón no fue, él está muy lejos para haberlo hecho. —señala Tristeza, quien estaba junto a Vergüenza en la sección de libros.
—Además este rosa es muy pálido para ser de Vergüenza. —señala Ansiedad, acercándose a la consola.
—De hecho es rosa palo. —dice Desagrado.
—¿No es lo mismo? —pregunta Envidia.
—Claro que no, pequeña. Son totalmente diferentes.
—Oh. Me gustaría haber dicho eso. —susurra Envidia mientras juntaba sus manos.
—Pero aún no sabemos quién puso la consola ro...
—¡Hola! —grita una emoción rosa palo.
Era una emoción masculina delgada con ropa casual, una chaqueta rosa con pantalones del mismo color, pero un poco más oscuro.
Su cabello era un poco alborotado y, al igual que el resto de él, era rosa.
Sus ojos eran lila, llevaba brackets y lentes pequeños.
—¡Una nueva emoción! —grita Alegría sonriendo.
—Hola. Soy Amor.
—Te ves me bien. —dice Alegría al verlo.
—No estás tan mal. —dice Desagrado alejando discretamente la mirada. No era que Amor fuera feo, pero no era el tipo de chico que a Desagrado le atrajera.
—¿Alguien más viene contigo? —pregunta Ennui viendo su celular.
—Sí. Vienen...
La consola se vuelve café.
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Intensamente 3
RandomLos años pasaron, Riley ya tiene 17, está apunto de graduarse y se convertirá en una adulta. Nada podría salir mal ¿Verdad, emociones nuevas?