30/Agosto/****
Para: ****
De: Jan GaytánY entonces te vi llegar, con aquella sonrisa que alguna vez yo provoqué.
Te acercaste y me sentí desfallecer, estaba echa un caos en mi interior; mis piernas y manos temblaban, mis mejillas ardían, mis ojos picaban y mi estómago daba vueltas.
Me pregunto si acaso sabías lo que yo estaba sintiendo.
Me miraste como muchas veces lo hacías, pero a diferencia de las otras, en tu mirada había un vacío, ya no estaba aquello que irradiaban al verme.
Me miraste con la misma tranquilidad que anteriormente me transmitía tanta paz, me miraste como si se tratase de cualquier persona, me miraste sin importancia, como si realmente ya no te importará.A diferencia de las otras veces, en tu mirada ya no había amor, no sentía aquella paz que transmitían, por el contrario, mi amor por ti y la falta del tuyo hacía mí me estaban consumiendo.
En esta ocasión, ya no me perdí en lo oscuro de tus ojos para encontrarme en el brillo de ellos, si no que me hundí en el vacío, cayendo cada vez más a fondo, rogando que volvieras a mirarme como cuando eras mío, cuando yo era tuya, cuando tú me amabas, “cuando tus ojos me miraban”.

ESTÁS LEYENDO
Cartas que nunca llegaron
Diversos"Cartas que nunca llegaron" es un libro donde tomo el valor de decir lo que me hubiera gustado que la gente supiera, un libro de palabras que nunca fueron pronunciadas en voz alta, palabras que nunca fueron plasmadas en un papel para ser enviadas, p...