un abrazo es suficiente • Mariana x plex (Finalizado)

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Hacía apenas unos meses cuando me pidieron pelear contra tí, nos pusimos de acuerdo, cada quien iba a entrenar por su lado pero una vez cada mes, por una semana entrenariamos hasta el día de la velada, 4 meses no son mucho

Así fue la primera vez que entrenamos, tu habías volado de México hasta España solo para entrenar

—que tal chaval, tu vuelo fue cansado?— te pregunté con amabilidad mientras te sentabas en el gimnasio
—un poco, pero de hecho estoy bien, me hubiera pegado más si fuera mi primera vez— me sonreiste, como la sonrisa de alguien podría cautivarme tanto?
—bien... Hay que entrenar, te parece?—
—claro—

Ambos hicimos lo que teníamos nos defendimos bastante bien, tu potencial era alucinante, ambos terminamos completamente cansados

—oye, vamos a comer, te apetece?—
Te pregunté y tú me miraste y asentiste
—si, vamos a comer, ya hace hambre—
Te ayude a levantarte y fuimos a un restaurante, nos sentamos y empezamos a hablar de nosotros
—y entonces te llamas Osvaldo?—
—si, pero como quieras llamarme está bien, mientras no sea a mentadas de madre—
Te reíste, el sonido más bello que pudieron escuchar mis oídos
—que es eso? Mentadas de madre? Conozco el término pero nunca supe que era—
—oh, es insultarse mucho, Rivers y yo nos tratamos así todo el tiempo—
—ja, ja, creo que mis amigos también nos hablamos a insultos—
Conversamos mucho, ni cuando comimos podíamos parar, pronto terminamos y pedimos la cuenta
—no te preocupes Valdo, yo pago—
—valdo? Nadie me dice así, solo algunos de mi comunidad y mi mamá— te reíste de nuevo
—oh, lo siento tío, te molesta?–
—no, para nada, no te preocupes bro—
Nos sonreímos y pague la cuenta, salimos
—te apetece que te dé un recorrido por madrid, después te puedo dejar en tu hotel, si deseas—
—un recorrido me encantaría, vamos—
Te dije, ambos comenzamos a caminar por las calles más concurridas de Madrid, te parecía todo muy hermoso, parecía como si nunca antes hubieras venido
—me encanta Madrid, la comida aquí es muy rica— me mencionaste y yo solo te sonreí
—me gusta—
—que dices?—
—que me gusta como te expresas de la ciudad— te sonreí y tú también a mí
—gracias, creo que ya es hora que vaya a mí hotel está oscureciendo—
Yo asentí y fuimos caminando a su hotel
—sabes... El próximo entrenamiento podría ser en México y te puedo invitar una comida—
—si, claro, pero jamás dejaría que me pagarás algo—
Negaste con la cabeza y te adentraste a tu hotel, me sentía completamente hipnotizado en ti, no podía dejar de mirarte, no sabía porque, pero la manera en la que me hablabas, la forma en la que te expresas de las cosas, son cosas que te hacían único, me encantaste desde el momento uno que entable conversación contigo, eras simplemente la mejor persona que conocí

Regresé a mi casa sonriendo, todo el camino fue sonriendo, no sé cómo tú estabas, no sé si te pasó eso desde ese momento como me pasó a mí, después de todo esto, te preguntaré, como fue que te enamoraste y en qué momento fue, quisiera saber que pensabas de mi, me gustaría que pensabas en el momento que me viste en el cara a cara de la velada, que ibai tenga lo mejor porque por el te conocí a ti, sabía que no podría hacerte daño de ninguna forma, pero eso era básicamente inevitable

Recuerdo mucho esa primera semana, tu y yo paseando en Madrid, tomando fotos de nosotros que ninguno publicaría, solo esperábamos que si el otro perdía no quedáramos destruídos por los comentarios de ambas comunidades, pero esa semana la nombré la mejor de mi vida hasta ese momento, no sabía que cada vez que te volvía a ver sería otra semana mejor que la anterior, son cosas que pasan.

Cosas que pasan cuando estás enamorado

Pronto esa primera semana se terminó, te fuí a dejar al aeropuerto
—entonces la próxima vez en México?—
—si, la próxima vez en mi país—
—oye Valdo... Me la pasé grandioso contigo, quieres seguir manteniendo el contacto?—
—claro, te escribo mi número por Instagram y nos hablamos, si?—
—claro, me encantaría eso, entonces... Buen vuelo—
—gracias, adiós—

Nos abrazamos y te fuiste, pensaba que no tendría tu número pero horas después me llegó un mensaje con tu número, rápidamente te agregué y no paré de sonreír

—hola, soy plex
—holaa

Desde ese momento todo fue mejor para mí