[Paraíso sin sentido] tokyo revengers and Haikyuu

Cap-21

pov narradora

Hatsume se encontraba en un lugar desconocido, rodeada de sombras y silencio. De repente, escuchó la voz de Kazutora, gritando su nombre. Ella trató de correr hacia él, pero sus piernas estaban pesadas, como si estuvieran atrapadas en el suelo.

Mientras corría, la escena cambió y se encontró en el hospital, junto a la cama de Baji. Pero esta vez, él no sonreía, sino que estaba pálido y quieto. Hatsume trató de sacudirlo, pero él no se movía.

La escena cambió de nuevo y se encontró en la sala del tribunal, donde Kazutora estaba siendo juzgado. Pero esta vez, el fiscal era Mikey, y él la acusaba a ella de ser la culpable de todo.

Hatsume trató de defenderse, pero su voz no salía. La sala se llenó de caras conocidas, pero todos la miraban con desprecio y odio.

De repente, la escena cambió y se encontró sola en una habitación oscura. Escuchó pasos detrás de ella y se dio la vuelta, pero no había nadie. Los pasos se acercaban cada vez más, y Hatsume trató de correr, pero sus piernas no la sostenían.

La habitación se llenó de sombras y Hatsume se sintió atrapada. De repente, una figura emergió de la oscuridad. Era Oikawa, pero su sonrisa no era amistosa, sino siniestra.

Hatsume trató de gritar, pero su voz no salía. Oikawa se acercó a ella y le susurró algo al oído. Hatsume se despertó de golpe, sudando y con el corazón acelerado. Era solo un sueño, pero la sensación de miedo y ansiedad persistía.

Se recostó en su cama y se oculto dentro sus sábanas mientras temblaba,  no durmió desde aquella pesadilla y no sabe cuantas horas pasaron, su mente volvió a la realidad cuando escucho que alguien tocaba la puerta de su habitación

-Hija? Puedo pasar?-- pregunto una voz masculina

Ume hizo un sonido de afirmación y después se escuchó los pasos acercandose, al sentir el peso del hombre al lado de su cama ella lo habrazo aún cubierta por las sábanas

-madre ya se fue?.. --pregunto con la voz entre cortada-- perdón por mi actitud cuando llegue..

Su voz sonaba triste y pesada a pesar que ella de verdad se disculpaba, aún que lo sucedido no fue su culpa

-no mi amor, no fue tu culpa-- dijo su padre mientras le quitaba las sábanas para ver su rostro-- Kōmori es impulsiva, no fue tu culpa

Kichiro Takahashi
37 años
Empresario japones de ventas
Administrador de empresas
Propietario de haciendas alrededor del mundo

-no estés triste, tu madre ya se fue-- la abrazo para después acomodarla en su cama-- descansa un rato más, falta para que entres a clases

La rubia se limito a asentir con la cabeza para después ser cubierta por su sabanas

-hace un poco de frío, quizás llueva por la mañana-- se dirigió a la puerta y salió aún sin cerrarla-- duerme mi niña, Kōmori vendrá por la noche..

Al decir eso cerro la puerta y se dirigió a la sala, dónde prendió el televisor para después sentarse en el sofá

Miro alrededor de la casa y algunas lágrimas caían por su rostro, se limito a secarlas rápidamente

-perdon por ser un cobarde, tu y tu madre son lo único que me quedan, no pienso fallarles..-- dijo sollozando pero aún así con un tono serio

Pasaron las horas y Hatsume se
Preparaba para la escuela

-papá ya voy a la escuela-- dijo acercandose