Lua aradia es una chica con una vida tranquila, no se queja de su vida ya que tienen lo suficiente como para alimentarse bien y no les falta nada, pero pronto su vida dará un cambio de 360°.
Y cuando cre que por fin su vida volverá a ser estable, el...
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Desde que me enteré de su muerte es como si estuviera en automático me fundí en el abrazo de Victoria y no me he separado de ella, ella tampoco me ha soltado, realmente no se cuanto tiempo ha pasado, he perdido la noción de todo, lo único que puedo sentir es un profundo dolor y como las lágrimas no paran de caer por mis mejillas.
No se en qué momento paso pero en este preciso momento me encuentro sentada en una cama muy cómoda que huele muy bien, Victoria ya no me está abrazando estoy sola en un cuarto desconocido, debería de ponerme alerta y tratar de salir de aquí pero me siento muy cansada además de que siento mi cara demasiado hinchada de tanto llorar.
—ya despertaste lu— me sobresalte al oír una voz a mi lado en la cama. Baje la mirada y me encontré a una Victoria con un semblante un poco cansado que me miraba con una pequeña sonrisa. —como estás?— esa pregunta me hizo recordar todo y sin quererlo me entraron ganas de llorar no lo pude contener y me lance a llorar al hombro de Victoria.
— yo... Yo la perdí Victoria... La perdí para siempre... Nunca más la volveré a ver— le dije entre sollozos mientras ella me acariciaba el pelo.
— no podré oir su voz... Verla... Verla reír... O... O tan siquiera verla... No sé cómo seguiré sin ella— las palabras no dejaban de salir de mi boca mientras sentía como me dolía el corazón es como si me enterraran un millón de dagas al mismo tiempo y creo que eso se quedaría corto con el dolor que siento.
No puedo seguir sin ella, no puedo pensar en un futuro sin ella, ella me complementa, le da vida a mis días, le da color a mi vida, ella lo es todo para mí.
— que voy a hacer sin ella Victoria? — no podía detenerme necesitaba soltar todo para sentir que podía respirar, es como si declarar mis sentimientos hacia la situación, me ayudara a asimilarlo pero a la vez me hundía más en aquel oyó negro del que tanto cuesta salir.
Yore todo lo que pude hasta que me sentí muy cansada hasta que mis párpados no lo resistieron y se cerraron solos solo en ese momento me deje llevar hacia mis sueños unos donde podía vivir feliz con ella.
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Después de que le dieron la noticia a lua fui testigo de como su mundo se destruía de un tirón, sin anestesia, ni previo aviso la sostuve en mis brazos antes de que callera, y en ese momento me jure jamás dejarla caer.
No podía creer como era tan fácil destruir la felicidad de una persona con una sola noticia, como un solo hecho podía hacer que las personas más fuertes cayeran, sin embargo ahora lo entiendo, después de unas cuantas horas analizando toda la situación me di cuenta de que me pasaría lo mismo si pierdo a Lua, porque no podría vivir sin ella.
Este pensamiento y todo el amor que siento por ella me llevaron a cuidar de ella toda la noche, presencie como incluso dormida no paraba de sufrir pues había tenido diversas pesadillas durante toda la noche, la cuide y trate de que ella durmiera tranquila pero después de un tiempo despertó.
Hablar con ella fue algo que me rompió el corazón, oir cada palabra salir de su boca con tanto dolor y tristeza me partió el alma si bien yo no estoy tan involucrada sentimentalmente con Samantha, Lua si que lo estaba, y cuando ella sufre yo también lo hago la he consolador lo mejor que he podido hasta que se quedó dormida.
La acomode mejor en la cama y ayude a desinflamar sus ojos, sabía que eso no aliviaría el dolor que siente por la muerte de Samantha pero si disminuiría la sensación molesta de tener los ojos hinchados cuando despertara.
Encendí un difusor y coloque un aroma relajante, la observé dormir atenta por si necesitaba algo o tenía que despertarla de otra pesadilla, pero el difusor había funcionado y durmió tranquila.
Al otro día, por la mañana hice el desayuno y espere a que ella despertara para ofrecerle comida y agua, ella tomó el vaso de agua y lo bebió rápidamente.
— muchas gracias Vicki pero no tengo hambre — —tienes que comer Lua, por favor— —lo siento Vicki pero no puedo—
Yo sabía que no iba a comer por ella sola así que tome la cuchara y la moví como si de un avión se tratase, puede que eso fuera infantil pero ella mostró un atisbo de sonrisa y abrió la boca.
Durante toda la hora le di de comer en la boca mientras le hacía plática, ella se terminó el plato y yo le sonreí agradecida de que haya comido pues llevaba alrededor de 15 horas sin comer. Me costaba hablarle como antes lo hacía, porque ella no sonreía y no le brillaban los ojos como solían hacerlo, aún así me esforcé pues si no hacia que sus ánimos subieran ella y yo seguiríamos sufriendo.
— baby vamos a ducharte, puedes hacerlo sola o necesitas ayuda — le dije, ella se sonrojo. — creo que necesito que me ayudes — susurro apenada.
Ella se trato de parar de la cama pero no pudo, no tenía nada de fuerza así que la ayude a pararse y a caminar la lleve hasta la ducha y le temple el agua mientras ella se desnudaba para bañarse yo no mire más de lo que debía estaba muy tentada pero no quería que eso pasara así.
La ayude a enjabonarse la espalda mientras ella se enjabonaba la parte de adelante de espalda a mi, con una mano se sostenía a mi cuerpo y con la otra se enjuagaba. Yo lave su cabello con sumo cuidado acaricie su cuero cabelludo y la ayude a salir la dejé en la cama y salí de el cuarto para que pudiera cambiarse tranquila
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~ Yo solo quiero alguien que me cuide como Miko cuida a Lua
