-Richard y yo estuvimos viendo vídeos en su teléfono mientras esperábamos al amigo de el que iba a traer la silla de ruedas, luego de un rato le llegó un mensaje del amigo diciendo que ya había llegado-
Richard: mami ya vengo, voy a recibirle la silla para venir a ayudarla a arreglarse
Aylen: bueno -le sonreí y el igual a mi-
-Richard bajo y yo por mientras me quedé pensando en cómo me podía bañar, ya que yo no iba a salir sin antes bañarme, me siento incómoda si algo sin bañarme, estaba perdida en mis pensamientos cuando de repente entro Richard-
Richard: vea, ¿Y usted en qué tanto piensa?
Aylen: en cómo me voy a bañar, yo no pienso salir sin antes bañarme
Richard: ay jueputa, eso sí va a estar difícil, ¿Y si me tapo los ojos con algún trapo y la ayudo a sostenerse?
Aylen: sería la única opción?
Richard: pues es lo único que se me ocurre-
Aylen: -suspire- bueno, entonces intentemos
-Richard agarro un trapo bien oscuro y me tomo en brazos para llevarme al baño, me paró en la ducha y yo me sujeté de el levantando el pie, ya que si tocaba el suelo me daba un dolor horrible, el se vendó los ojos lo mejor que podía y me sujetó fuertemente para yo poder comenzar a sacarme la ropa, aún así el no viera nada tenía la cabeza volteada hacia la izquierda que por si se le caía el trapo, me tenía bien sujetada de la cintura, así que yo prendí el agua y comencé a bañarme toda, me puse mis tratamientos para el pelo ya que me gusta tenerlo siempre lindo, también me puse jabón y cuando terminé me puse la toalla y Richard apenas vio que terminé me tomo en brazos obviamente ya con la toalla puesta-
Richard: usted me guía mami porque yo no veo es nada
-lo guíe y el me paró en el suelo en frente del armario, Richard se puso atrás mío mientras yo empezaba a secarme, luego me puse mi crema y al fin me empece a vestir
cuando terminé le avisé y con mi ayuda saqué la venda de sus ojos-
Richard: casi que no, ay jueputa me quedó doliendo, estaba muy apretada la webada esa -dijo tocándose los ojos-
Aylen: lo siento, trate de demorarme lo menos que pude
Richard: no pasa nada, reyna, por usted puedo esperar que se bañe horas y no me voy a aburrir -dijo a lo que los dos reimos-
Aylen: ayúdame a ir a mi tocador, porfis -dije sonriendo-
Richard: a la orden
-me tomó y me sentó en el tocador, ahí yo empecé a hidratarme la cara y luego me puse algo de maquillaje, me encrespé las pestañas, me puse rimel y un poco de brillo labial-
Richard: no sé porqué se maquilla si se ve bella sin maquillaje -dijo haciéndome sonreir-
Aylen: muchas gracias, pero me maquillo porque así me siento aún más linda
Richard: y no solo lo siente, también se ve más preciosa de lo que ya es -dijo sonriendo sacándome una sonrisa- hágale pues, ¿Vamos?
Aylen: vamos
-Richard de nuevo me volvió a cargar y salimos de mi habitación, cuando llegamos a la sala me sentó en la silla pero para nuestra mala suerte llegó milena-
Milena: ¿Y vos no tenés que estar trabajando?, además, ¿Que haces ahí en esa silla?, te ves ridícula, a menos que esté peladito te haya dejado así -dijo sonriendole a Richard-
Richard: no, pues parece que está ciega ome, ¿No está viendo que se fracturó el tobillo o qué?, eeeh avemaría
Milena: oigan a este, usted aprenda a respetar, no sea tan hijueputa, si así me trata a mi no me imagino como va a tratar a esta china más adelante, y como es tan boba se las va a perdonar todas
-Richard le iba a responder pero lo interrumpí-
Aylen: déjala Richard, no pierdas tu tiempo con ella que parece que fuera una adolescente, si viera que está tan vieja que tiene la cara llena de arrugas ya, Milena mejor empieza a preocuparte por tu cara que por mi vida -Richard comenzó a reír en silencio y antes de que ella volviera a hablar salimos de la casa-
Richard: uy no, la cara que puso la señora esa -dijo aún riendo contagiandome su risa-
Aylen: el regaño que me va a llegar por parte de mi papá cuando llegue a casa
Richard: no se preocupe mor, que yo voy a estar ahí cualquier cosa, ¿Oyó? -dijo haciéndome sonreír-
Aylen: muchas gracias Richard, por todo, eres como un angelito que llegó a mi vida para alegrarla - el río-
Richard: al contrario mami, aquí el angelito es usted, sentí un tipo de conexión cuando nos conocimos y por eso tanta insistencia en ayudarla, algo me decía que no tenía que dejarla ir -yo solo sonreí y seguimos comiendo nuestro helado en el parque-
-se me había olvidado contar pero con Richard ya habíamos ido a comer a un restaurante y ahora estábamos comiendo helado en un parque, ya estaba oscureciendo y el atardecer se veía hermoso, muy hermoso diría yo, creo que este fue uno de mis días favoritos por ahora, cuando terminamos nuestro helado vimos un rato más el atardecer y luego nos fuimos a casa, y como dije, ahí me esperaba el regaño de mi vida-
Carlos: aylen, ven aquí ahora mismo muchachita
Aylen: richard podrías llevarme para arriba, ¿Por favor? -dije ignorando a mi papá-
Carlos: ¿Me estás ignorando Aylen?, ¿Quien te crees que eres para ignorame y también insultar a tu mamá? Mal educada -ahi detuve a Richard y mire enojada a mi papá-
Aylen: ¡Esa maldita bruja jamás será mi mamá!, ¡Nunca! -dije con lágrimas en los ojos-
Richard: vea don, con mucho respeto le digo que empiece a ver bien a la mujer que tiene al lado, porque aunque llevo muy poco tiempo aquí, me eh dado cuenta de todas las humillaciones que esa mujer le hace a Aylen, y ella no se merece eso, buenas noches.
-Richard me cargó mientras yo lloraba abrazándolo y cuando llegamos a mi habitación cerró la puerta y se acostó conmigo abrazándome-
Richard: mor, no llore por esos hijueputas, no vale la pena
-yo solo pude responderle con un abrazo un poco más fuerte y el me hizo caricias en el pelo hasta quedarme completamente dormida al igual que el-
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Mi Colombiano -Richard Ríos y Aylen-
Teen Fictionestá historia va a ser algo diferente a las demás, ya que en todas, literalmente todas las historias, el hombre es el malo, el infiel y que el que hace llorar a la muchacha, pss hoy van a ver qué aquí no es así, ya verán cuando lean 🙂