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—¿Tan poco te quieres, Hanni?

—Ya vale, Chae. Tenia que intentarlo de alguna manera. Yo solo quiero que pase tiempo conmigo para que vea que soy buena, incluso más que mi hermana. Que puedo ser una buena novia.

—Hanni, pero a ella...

—Que sí, que le gusta Danielle, ya. Pero era la única manera de que me hiciera caso.

—¿Cuál es tu plan?—Hanni dejó la mochila sobre la cama de su habitación y miró a Chaewon, que se acababa de sentar en la silla del escritorio.

—Enamorarla. Enamorarla tanto que se olvide de mí hermana.

—Hanni...

—¡Puede pasar! Yo no pierdo la esperanza. Y no sucede sé que lo voy a pasar mal, y que probablemente tenga que cumplir el trato porque soy una persona de palabra, pero es mi única oportunidad, Chae.

—Esta bien, Hanni... Yo lo único que no quiero es que sufras.

—Lo sé y por eso te quiero.—Hanni se acercó a Chaewon y le dió un beso en la sien.

—Por cierto, ¿tu hermana sabe algo?

—¿Del trato? No. Si ella se enterara de que he hecho esto no me habría dejado hacerlo.

—Pero ella sabe que te gusta Minji. Si el trato no saliera... ¿cómo vas a hacer que ella y...

—No quiero pensar en ello—Interrumpió—, prefiero que no suceda. Ya veré que pasa dentro de un mes.

—Tienes mucha confianza en tí misma, ¿eh?— Chaewon rió

—Si no la tengo yo, ¿quien la va a tener?— Hanni rió.

***

Minji le explicó a Yunjin todo lo hablado con Hanni: el trato y lo que pensaba. Estaba a cuadros.

—Menudos ovarios tiene.—Dijo riendo.

—Pierde el tiempo si cree que mi pensamiento hacia ella va a cambiar.

—Pues podría.—Dijo Yunjin y Minji la miró — ¿Qué? la odias sin motivo desde hace meses porque... ¿te tiró tierra encima sin querer? ¿porque te quiso enseñar una orquídea? Minji por favor, ni siquiera la conoces.

—Porque siempre me estropea todo con Danielle.

—Minji, el mundo no gira entorno a Danielle

Minji rodó los ojos.

—Tengo derecho a odiar a quien quiera.

—Es cierto.—Yunjin cerró su locker y siguió andando junto a Minji—Pero Hanni es una de las chicas más guapas que he visto, que encima parece que está un poquito colada por tí y ni siquiera puedes verlo porque estás pendiente de su hermana. Da que pensar.

—Hanni y yo... Escalofríos de pensarlo Yunjin.

—Mira que eres terca.

De pronto una rubia apareció de la nada, haciendo frenar a ambas el pasó. Hablando de la reina de Roma.

—Yunjin,—Dijo en forma de saludo mientras sonreía, la pelirroja le devolvió el saludo con mucho gusto. —Minji— Esta última tenia el rostro un poco más amargo.

—Hanni—Añadió Minji con el mismo tonito.

—Toma, por si lo necesitas a la hora de almorzar.—Le dio una bolsa a Minji, al parecer llevaba algo dentro.—Ah y esto ábrelo después, en casa.—Hanni sonrió de la manera más pura que pudo y salió de ahí.

𝐃eal | bbangsazDonde viven las historias. Descúbrelo ahora