My dear, you are my all | Checlerc

four. CharlesPOV

El gran premio de Emilia-Romagna no había podido dar inicio gracias a las fuertes lluvias, más la FIA los tenia retenido aun en los garajes pues se creía que la lluvia aún podía desaparecer o al menos disminuir; hasta que los neumáticos de lluvia fueran lo suficientemente seguros para los pilotos, y todo eso en un tiempo, sin embargo a este paso no creía que eso sería posible la lluvia cada vez se volvía más densa.

-Realmente no los entiendo, nos tienen aquí amarrados como perros-dijo Carlos, su voz fastidiada le causaba empatía pues conocía a su compañero de equipo y sabía que no era muy fanático de las lluvias fuertes, al igual que el, le generaban cierto temor... No solo temor pavor, ansiedad...

-¿Charles?-
-¿Estas bien?-

-Si.-

-Bueno si tu lo dices.-sus pasos lejanos le hicieron darse cuenta de la ausencia de su compañero de equipo que hace poco se encontraba en su cercanía.

Odiaba esos días en particular desde aquel momento...-¿Porqué te fuiste?-

-¿Charles, cierto?-esa voz, no podía ser; o sí.

Levantó su mirada, ahí enfrente de él; su postura era impecable, pero su rostro no se encontraba tranquilo.

-Si, así es, el mismo.-
Su risa era tan delicada.

-Ya, ya, Sergio un gusto Charles. Me podrías ayudar en algo-realmente, e incluso si le pedía que le trajera un ruiseñor el se lo traería.

-Claro, dime en que puedo servirte-

-Podrías ayudarme decidiendo que fotos son las mejores para mandarlas-

-Seguro, ¿Cuáles son las opciones?-Corazón, por favor ten calma, sus latidos iban rápido.

Sus manos se rozaron, una caricia sin tosquedad ni aspereza, solo suavidad; admiraba cada detalle de la mano de "Pecas", rió por el apodo, desde cuando lo llamaba de esa manera.

-Me parece que las do son bellísimas.-
Soltó una carcajada bastante destemplada, la cara de "Pecas" era demasiado graciosa, sus labios se habían extendido en una línea, y su ojos se había cerrado ligeramente, le recordaba a un pato.

-No me parece gracioso, que lo sepas.-dijo mientras cruzaba sus brazos.

-Lo siento, lo siento.-

-Disculpen, pero la FIA ya autorizo qué los equipos nos retiremos y vayamos hacia el siguiente premio.-un ingeniero avisó.

-Entonces, ya sabes, ¿podemos irnos?-

-Si, podemos irnos, de hecho ya nos vamos, bueno al menos yo, adiós.-pronto el ingeniero desapareció, había salido corriendo, ¿a dónde? Para preguntarle en otro momento.

Volteo a ver a "Pecas" al parecer el también lo estaba viendo, rieron al mismo tiempo.

-Creo que no tenía prisa.-añadió con sorna.

-Creo lo mismo.-

-Al final me vas a decir cual es la mejor.-cuestionó.

-Las dos me parecen lindas.-

-¡Charles!-sonrió estaba seguro que había puesto otra vez esa expresión de pato.

Se levantó de su silla, ya era hora de retirarse, sus temores qué habían sido olvidos por un momento volvieron, generalmente en estas ocasiones solía pedir que lo llevaran a casa, buscaría a Carlos.

-Bueno, me la he pasado muy bien a tu lado Sergio pero es hora de que me retire, deberías hacer lo mismo.-le sugirió.

-Claro, eso haré, y admito que también me la he pasado bien a tu lado Charles, nos vemos-"Pecas" se alejaba agitando su mano de un lado a otro, y le devolvió el gesto despidiéndose de él.

Ahora iría a buscar a Carlos.

-Disculpa sabes de casualidad de Carlos.-le preguntó a una chica que parecía a punto de irse.

-Carlos se fue en cuanto pudo-¿Qué?¿Cómo?

-Gracias-la chica tan solo se retiro, tal vez debía enfrentar sus miedo.

...

Sus manos temblaban en el volante del auto, ¿Si pasaba algo?, si moría...

¿Qué era eso?, bajo el vidrio de su coche, o era "Pecas".

-Charles, se que puede sonar repentino pero me puedes llevar, no te preocupes si gustas yo conduzco hasta mi hotel-

Si, eso era, tal vez luego podría irse caminando a su hotel.

-Claro, deja voy hacia el asiento del copiloto-Vaya su voz había sonado desesperada.

-Oh, bueno, muchas gracias-que linda sonrisa tenía "Pecas".

Ahora los dos estaban en el coche en sus lugares.

-Charles... podría poner...-¿Qué había dicho?, lo último no lo había entendido, al parecer su cara de confusión la capto, tenía vergüenza; estaba bastante rosado.

-Música, poner, es decir, poner música, ¿puedo?-Oh, era eso.

-Claro, no hay problema, mientras no sea rap-tenía preferencias.

-¡En serio!, gracias, no se como pagártelo luego en Mónaco te lo recompensare te invitaré a algún lugar.-

-No es nada Sergio.- se sorprendía de lo calmada que se encontraba su voz, "Pecas" lo estaba invitando a cenar y estaban en el mismo auto.

-¿Rap?, no te gusta el rap.-volteo a verme con una cara de confusión total.

-Si, no soy fanático, tengo gusto.-dije con simpleza.

-¡Wow!, conozco a poca gente que no le guste, a la mayoría de mis amigos les gusta el rap.-

-¿Enserió?, puedo ser el primero.-¡¿Charles Leclerc que haces?!

El solo se rió... eso era algo bueno o malo, ojalá me tragará la tierra y me escupiera en Mónaco.

-Me parece perfecto, Charles dime en que hotel te quedas.-Okey Charles tranquilo.

-Si soy sincero no recuerdo como se llama, pero si se, si se que tiene dos restaurantes al lado.-eso Charles no era tan difícil.

-De casualidad uno no es de color amarillo y el otro blanco con azul.-

-Ahora que lo recuerdo si, así es.-podria ser...

-¡Yo me quedo en el mismo hotel!-así era, ¡Si!

-¿Enserió?-sin duda el destino me ama, gracias.

-No-

Ya me confundí, ¿por que se reía?

-No, no si me quedo ahí, lo siento es que te acabo de decir que me quedo ahí y me preguntas otra vez que si me quedo ahí, no lo pude evitar.-tenía un punto, ahora yo también reía junto a él.

-Hemos llegado.-
El tiempo a su lado se había ido rápido, junto con mis temores.

-Espero vernos más seguido Sergio.-dije compartiendo mi deseo de seguir frecunetandonos, mientras bajamos del carro y caminábamos hacía la recepción del hotel.

-Checo, dime Checo.-

-Checo, nos vemos Checo.-mi corazón latía solo por él...