ÚNICO.

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Lucifer era el novio de su hermana.

Eso Alastor lo tenía claro. 

Sabía que en cuanto terminara la visita de Lilith, Lucifer se iría con ella.

Después de todo, Lucifer amaba a su hermana.  

—Hueles delicioso, Al —susurró Lucifer con voz ronca, rodeando con sus brazos el cuerpo encima suyo. Sus dedos se deslizaron debajo del pantalón de Alastor, trazando una línea sobre sus bragas. Sentía la calidez bajo la tela, y continuó explorando hasta que se encontró con la humedad del coño cálido del hermano menor de su novia.

De una forma más ansiosa siguió acariciando con más insistencia, restregando sus pliegues y sintiendo sus primeros chorros empaparlo. Sus dedos se movían con precisión, provocando que Alastor temblara y se mordiera el labio, intentando contener los sonidos que escapaban de su garganta.

Por el rabillo del ojo, el omega desvió su vista hacia la puerta principal, sabiendo que en cualquier momento alguien podría entrar y descubrirlos.

¿En que momento empezaron a hacer ese tipo de cosas?

 Solo estaba bromeando al inicio. 

Esto definitivamente acabaría. 

Sin embargo, lejos de querer que acabara, lo único que deseaba era continuar. 

—¿Te gusta, Al? —murmuró Lucifer, con su voz cargada de deseo mientras su pulgar rozaba el clítoris de Alastor en círculos lentos.

Alastor no pudo responder. Su mente estaba nublada por el placer, sus caderas se movían instintivamente contra la mano de Lucifer, buscando más fricción, más contacto. El interior de sus muslos ya estaba mojado, apretándose alrededor de la nada. 

—Haciéndole esto al hermano de tu novia—murmuró Alastor, sonriendo levemente, acercando su mano hasta que quedó encima de la de Lucifer, incitándolo a seguir moviéndose, separando más sus piernas para que tuviera más espacio—Eres un pervertido.

Alastor movió sus caderas, presionándose contra la dura polla de Lucifer, ampliando su sonrisa al escuchar cómo el alfa gruñía. 

—¿Te gusta esto, Lucifer? —se burlo Alastor,  moviéndose lentamente, incrementando la presión contra la mano de Lucifer y contra su propia entrepierna. 

Lucifer gimió suavemente, su respiración se volvía cada vez más pesada. Frotó los labios menores de Alastor con más rudeza, hasta que finalmente palpó su entrada, abriendo con una de sus manos el mojado coño de Alastor y insertando lentamente dos dedos en su cálido interior. Alastor jadeó, su cuerpo se arqueó hacia adelante, sus paredes internas se apretaron alrededor de los dedos de Lucifer.

El omega se estiró para apoyar su mano sobre el respaldo del sillón, gimiendo en voz baja y removiéndose sobre el regazo de Lucifer una y otra vez. 

—Eres tan hermoso así... —murmuró Lucifer, besando su nuca—Tan abierto para mí.

—Hmmm—Jadeó abriendo su boca.—¡Ah!

Alastor solo necesitaba un poco. Solo un poco más y se correría. Necesitaba más de esa deliciosa fricción.

—Vamos, cariño, no tenemos mucho tiempo. Tu hermana y tus padres llegarán en cualquier momento.—dijo Lucifer aumentando la velocidad de sus embestidas.

Su hermana...

Lilith lo iba a matar si viera todo lo que su novio le estaba haciendo. 

Sus pies se enredaron con los de Lucifer mientras seguía moviéndose, la presión y el roce aumentaban con cada segundo. Los dedos de Lucifer se movían más rápido, explorando y acariciando con una necesidad que hacía que Alastor perdiera el aliento. La combinación del placer en su clítoris y la sensación de los dedos de Lucifer dentro de él estaba llevándolo al borde.

USAHI// Appleradio AU human (omegaverse)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora