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𝐄l chico en mi ventana.

⚊ Sam se quedó paralizado por unos segundos, sin saber cómo reaccionar ante la aterradora escena que se desarrollaba frente a sus ojos. El chico de la ventana, con una mirada enloquecida y una sonrisa macabra, seguía intentando romper el cristal, acercándose cada vez más a Sam. Finalmente, Sam reaccionó y se levantó de la cama, buscando desesperadamente algo con lo que poder defenderse. Tomó el primer objeto que encontró a su alcance y se preparó para enfrentar al intruso. ⚊

Sam: "Quien quiera que seas, ¡Alejate de mi y de mi casa!"

⚊ Dijo Sam, para luego agarrar firmemente el pesado jarrón de cerámica que había en su mesita de noche. Con el corazón latiéndole a mil por hora, se acercó lentamente a la ventana mientras el intruso seguía forcejeando para entrar. Cuando estuvo a pocos pasos, Sam alzó el jarrón por encima de su cabeza y, con todas sus fuerzas, lo estrelló contra el cristal, haciéndolo añicos. El chico al otro lado de la ventana retrocedió sorprendido, pero rápidamente se recompuso y, con una mirada aún más enloquecida, comenzó a trepar por la ventana rota. Sam no lo pensó dos veces y, sin soltar el jarrón, salió corriendo de la habitación, bajando las escaleras a toda prisa. Tenía que salir de allí, tenía que pedir ayuda.⚊

⚊ Sam corrió escaleras abajo, sintiendo el aliento del intruso cada vez más cerca. Su mente estaba en caos, pero la adrenalina le otorgaba claridad. Al llegar al vestíbulo, se detuvo un instante para escuchar. El sonido de cristales rotos resonaba en la casa, seguido de risas desquiciadas. ⚊

⚊ Sin tiempo que perder, se dirigió a la puerta principal, pero al abrirla, se encontró con un oscuro pasillo que parecía extenderse infinitamente. La luz de la luna iluminaba tenuemente el camino, creando sombras que danzaban a su alrededor. Sam dudó, preguntándose si debería salir o enfrentar al intruso. ⚊

⚊ Decidió que no podía dejar que ese chico se apoderara de su hogar. Regresó a la sala, buscando algo más que un simple jarrón. Sus ojos se posaron en un antiguo bate de béisbol que había pertenecido a su padre. Lo tomó con ambas manos, sintiendo su peso reconfortante. ⚊

⚊ Mientras tanto, el chico de la ventana había logrado entrar, sus ojos brillando con una locura palpable. Sam se preparó, el bate en alto, listo para defenderse. ⚊

Sam: "¡Aléjate!"

⚊ gritó, su voz resonando con una mezcla de miedo y determinación. ⚊

⚊ El intruso se detuvo, su sonrisa macabra se amplió aún más. ⚊

???: "¿Por qué tienes miedo, Sam?"

⚊ dijo, su voz suave pero cargada de una amenaza latente. ⚊

???: "Solo quiero ser tu amigo."

⚊ Sam sintió un escalofrío recorrerle la espalda. No era un juego; era una pesadilla. Sin pensarlo dos veces, se lanzó hacia adelante, el bate en movimiento. El chico se apartó, riendo, como si disfrutara del caos. ⚊

???: "¡Eres más rápido de lo que pensé!"

⚊ exclamó, mientras Sam giraba para atacarlo de nuevo. ⚊

⚊ La lucha fue intensa, un choque de instintos primarios. Sam se movía con agilidad, pero el intruso parecía anticipar cada uno de sus movimientos. Finalmente, en un momento de distracción, el chico logró desarmarlo, lanzando el bate al otro lado de la habitación. ⚊

⚊ Sam retrocedió, buscando desesperadamente una salida. Pero el intruso se acercaba, su mirada fija y amenazante. En un último intento por escapar, Sam se lanzó hacia la puerta trasera, pero el chico lo alcanzó, agarrándolo del brazo. ⚊

???: "¿Por qué no te unes a mí?"

⚊ susurró, su aliento frío en el cuello de Sam. ⚊

⚊ En ese instante, Sam recordó algo que había leído sobre la psicología del miedo. Decidió usarlo a su favor. Con un giro rápido, se liberó del agarre y empujó al intruso hacia atrás, aprovechando el momento de sorpresa. ⚊

Sam: "¡No me toques!"

⚊gritó, corriendo hacia la cocina. ⚊

⚊ Allí, buscó un cuchillo, su mente enfocada en sobrevivir. Cuando se dio la vuelta, el chico ya estaba de pie, su sonrisa desvanecida, reemplazada por una expresión de furia. ⚊

???: "No puedes escapar de mí, Sam. Siempre estaré aquí"

⚊ dijo, señalando su propia cabeza. ⚊

⚊ Sam sintió que el aire se le escapaba. La locura del intruso no era solo física; era mental. En un acto de desesperación, lanzó el cuchillo hacia él, pero el chico lo esquivó con facilidad, riendo de nuevo. ⚊

???: "Eso fue un error"

⚊ dijo, acercándose lentamente. ⚊

⚊ Sam sabía que tenía que actuar rápido. Se lanzó hacia el armario, buscando algo más que pudiera usar. En medio del caos, encontró un spray de pimienta. Sin dudarlo, lo levantó y apuntó hacia el intruso.⚊

Sam: "¡Detente!"

⚊ gritó, su voz resonando con una nueva confianza.⚊

⚊ El chico se detuvo, su risa se desvaneció, y por un momento, el miedo se apoderó de su rostro. Sam presionó el botón, y una nube de aerosol se disparó hacia él. El intruso gritó, cubriéndose los ojos, y Sam aprovechó la oportunidad para correr hacia la puerta.⚊

⚊ Al salir, el aire fresco le golpeó la cara. Corrió hacia la calle, sin mirar atrás, sintiendo que la pesadilla finalmente estaba detrás de él. Pero en el fondo, sabía que la locura del chico no había terminado.⚊