Capítulo 53: Serenidad

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Jörmungandr y Fenrir aparecieron a través del portal, y se encontraron dentro de una Dimensión dorada y llena de chi, una que parecía rebosar de abundante energía vital.


"Cómo diablos logró ese bastardo encontrar una Dimensión tan buena siempre será algo que me pregunto a mí mismo". Dijo Fenrir mientras respiraba la poderosa energía que parecía casi infinita en este reino.


"Probablemente fue mamá dándole un regalo, de la misma manera que me dio ese martillo o te dio esa lanza. A la mujer le encanta dar regalos extravagantes a sus hijos". Dijo Jörmungandr mientras continuaba caminando, sin permitir que el poderoso Chi que los rodeaba lo tentara en lo más mínimo.


Los dos caminaron durante unos minutos y finalmente encontraron una visión extremadamente extraña para cualquiera que no fuera miembro de su familia.


Vieron a Oogway flotando sobre una roca gigante en posición de loto, con dos jóvenes sin camisa con cadenas envueltas alrededor de ellos tirando de la roca centímetro a centímetro.


"No hagas nada estu- Y se fue." Jörmungandr se dijo aparentemente a sí mismo mientras atacaba a Oogway con sus garras una vez más afiladas.


"Ahh. Esta es Harmony. Pea- ¿Y ahora qué?" La expresión serena de Oogway se transformó en molestia cuando su bastón se envolvió alrededor de la mano de su atacante, y luego envió un poderoso golpe de palma a su pecho que envió a Fenrir a volar.


"¿Fenrir? ¿Sigues siendo así de inmaduro después de todos estos años? Bien, te mostraré que mi sabiduría no carece de habilidad. ¡¡Prepárate!!" Dijo Oogway mientras pensaba en todas las veces que el lobo sucio lo había intimidado, con él atacando a Fenrir con tal impulso que la roca sobre la que estaba se hizo añicos, con Madara y Hashirama cayendo hacia adelante y con las caras llenas de tierra.


Jörmungandr estaba a punto de involucrarse, pero después de reflexionar, simplemente se sentó con la mano debajo de la barbilla mientras miraba la pelea en curso, aparentemente intrigado sobre cuál de sus hermanos menores era más fuerte.


"¡¡Tortuga tonta!! ¡¡Voy a convertirte en una sopa!!! ¡¡¡Soy un Maestro de las Artes Místicas por una razón!!!" Gritó Fenrir mientras se dirigía hacia Oogway nuevamente, con las manos envueltas en fuego, haciéndolo parecer aún más amenazador.


"Siempre hay más que aprender, incluso para un maestro." Oogway dijo mientras irrespetuosamente le daba un revés a Fenrir contra una roca cercana, con Oogway luego manipulando el Chi en el reino para crear enormes pilares de luz, bombardeando a Fenrir antes de que Oogway atacara su cuerpo nuevamente, lanzando poderosos golpes que simplemente golpearon a Fenrir más profundamente en el suelo.


Oogway luego usó su bastón para escribir un símbolo, que explotó sobre Fenrir con la misma fuerza que la Magia Nuclear, Magia capaz de destruir naciones enteras.


Luego, Oogway flotó en el aire mientras su capa dorada ondeaba con el viento, y el humo de su ataque se disipó para revelar a Fenrir, pero ya no estaba en su estado humano.


En cambio, Fenrir ahora estaba en su estado primitivo, con sus ojos brillando con un inquietante color verde mientras miraba a su hermano más como si fuera una presa en lugar de un hermano.


"Entonces te estás poniendo tan serio, ¿eh?" Oogway murmuró al ver a su hermano, con él cerrando los ojos.


"Eres el más infantil de todos nosotros". Dijo Jörmungandr mientras se levantaba, listo para intervenir y poner fin a la batalla antes de que se volviera demasiado serio.


"No es necesario, hermano mayor. Él siempre recorre este largo camino donde finalmente termina donde comenzó. Nunca llega a ningún otro lugar que no sea el mismo lugar infantil en el que comenzó, y es hora de que alguien le muestre un nuevo camino". Dijo Oogway mientras abría los ojos, ahora brillando con un color etéreo mientras aparecía directamente encima de Fenrir y colocaba una palma en su cabeza, y luego Oogway invocaba Runas tan antiguas que se decía que existían desde el comienzo del Universo.


Pero, justo cuando estaba a punto de pronunciar la primera Palabra de Poder, apareció Jörmungandr y le agarró la mano, con los dos mirándose a los ojos.


"Suficiente. Incluso si es tonto, sigue siendo nuestro hermano". Dijo Jörmungandr mientras miraba fijamente a los ojos de su hermano menor.


"Actúas como si fuera a hacerle daño grave. Sólo iba a convertirlo en un gatito por unas semanas". Dijo Oogway en su tono de Sabio, sin prestar atención a los leves hilos de miedo que aparecieron en los ojos de Fenrir ante esa revelación.


"Sabes, no creo que eso sea tan malo". Añadió Jörmungandr, haciendo que su miedo creciera aún más.


Pero la expresión de Oogway se volvió seria mientras miraba a sus hermanos, el Chi a su alrededor vibraba mientras los miraba con una mirada inquisitiva.


"¿Por qué están ustedes dos en mi reino?"


"A mí también me gustaría saber la respuesta a eso". Otra voz sonó cerca, y los tres hermanos encontraron a Irene mirándolos a todos con una mirada poco impresionada, una que los hizo sentir el miedo primario de su hermano mayor.

Naruto: El Hechicero SupremoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora