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E L D E S E O

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E L   D E S E O

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Todo parecía normal, la mayor de las hermanas Valkirias estaba en una sala junto a los humanos que habían ganado sus combates. En aquella sala estaban; Obviamente, el mayor perdedor de la historia, Sasaki Kojiro. A su lado estaba el infame asesino que puso londres patas arriba, Jack El Destripador, también estaba aquel que había traicionado a los dioses y le otorgó la tercera victoria a la humanidad. Buda, en la silla más lujosa de toda la sala se encontraba sentado aquel pelinegro con ojos vendados. El primer emperador, Qin Shi Huang, al lado izquierdo de la silla del emperador, estaban los otros tres. Uno de ellos era el amigo del dios. Sakata Kintoki, junto a él estaba el profeta de los siglos y llamado comodín de la humanidad. Michel Nostradamus (Nostrapito para los amigos) Y junto al francés estaba el que era el más pequeño en la sala. Aquel que había matado a Odín. Simo Hayha

— Les agradezco por haber venido —
Dijo la mayor de las Valkirias haciendo una leve reverencia ante los mortales antes de volver a su postura anterior y separar levemente los labios para seguir hablando
— Sin su ayuda, estoy segura de que no hubiéramos podido llevarnos la victoria. Me gustaría compartir con ustedes un aviso importante y es que los dioses han decidido recompensarnos con un deseó —
Ante esas palabras, la pelinegra logro ganarse la atención de los humanos. Se quedó en silencio y la sala permaneció sin ruido alguno hasta que se escuchó como alguien rompía el silencio. Ese alguien fue el llamado Rey de China

— Hao. Yo quiero pedir un ejército de subordinados que estén a mis órdenes —
Dijo el pelinegro con una sonrisa en labios, para el ese era el mejor deseó que se podía pedir. Todos en la sala lo miraron raro, el francotirador y Kintoki lo vieron con un seño fruncido intentando entender su arrogancia. El francés y el dios solo contuvieron las ganas de reír a carcajadas mientras el de apariencia más vieja de todos solo lo miro con una leve sonrisa. Por otro lado el peliblanco con heterocromia solo bebió un poco de te y soltó un leve suspiro

— Que es lo que tiene en mente, señorita —
Dijo viendo a la única mujer de la sala, su pregunta llamo la atención de los demás los cuales dirigieron su mirada hacia la Valkiria
— Tenía pensado pedir algo simple. Que todos los afectados, tanto humanos como dioses sean resucitados —
Ante sus palabras. Todos se quedaron en silencio y mostraron diferentes emociones

Sasaki mostró una mirada de nerviosismo pero al mismo tiempo de felicidad, pues vería nuevamente a Okita, pero el hecho de ver de nueva cuenta al tirano de los mares lo dejaba nervioso. Jack solo mostró una sonrisa melancólica, tenía ganas de ver nuevamente a aquel semi dios que fue el primero que le mostró un verdadero afecto.
Buda por su parte solo sonrió, pues tenía muchas ganas de ver a su amigo dios. Qin se quedó unos segundos en silencio hasta que sonrió al recordar al Rey del Inframundo.
Kintoki por su parte mostró un seño fruncido. De todos los presentes, el fue el único al que su rival lo desesperó, recordar esa irritante actitud tan infantil del dios egipcio, era desesperante. Nostradamus solo rio levemente y mostró una sonrisa de oreja a oreja. Su duelo con el dios del engaño lo había entretenido muchísimo y pensar en verlo otra vez le alegraba. Hayha por su parte solo se vio serio, su duelo con el dios nórdico habia sido una total cacería dónde por suerte. Salió victorioso pero era consciente de que su rival se fue con un rencor inmenso hacia el.

la sala se quedó en silencio hasta que nuevamente, el silencio fue roto por el proveniente de Inglaterra.
— Tengo entendido que, cuando un alma era destruida aquí, No volvía a reencarnar ¿Cómo podrán traer a los caídos de nuevo? —
Pregunto el peliblanco y tono como al pelinegra solo se encogió de hombros y separaba levemente sus brazos. Indicando que ni ella sabía cómo

— Sinceramente no lo sé. Zeus dijo que no nos preocuparnos por eso, me comunico que dentro de 48 horas lograrán reaparecer a todos los muertos —
Dijo con simpleza. Su respuesta ocasionó que el francés presente se le escapara una pequeña risa
— ¿Quiere decir que ya le habías pedido el deseo antes de reunirnos aquí? —
Pregunto con un tono algo acusador, pues había hecho que el emperador se ilucionara, el mismo al darse cuenta de que no le cumplirían su deseo solo recostó su cabeza en el respaldo de su silla con un seño fruncido

━━「 D I O S E S 」━━

En una sala, se encontraban los dioses ganadores. Se encontraban discutiendo sobre el deseo pedido por la valkiria y había varias opiniones

— Por mi no hay ningún problema —
Mencionó el dios Indú con una sonrisa — Ustedes que dicen —
Pregunto mirando a sus compañeros

— No le veo nada de malo, sería un evento hermoso de poder admirar —
Dijo el dios del sol griego, con una sonrisa calmada y deslumbrante, como siempre. Un fuerte golpe se escuchó y todos giraron para ver de dónde provenía, ese golpe fue dado por el destajador de dioses el cual tenía una sonrisa eufórica
— Jaja..! ¡Esa idea me encanta! Volver a ver a esos humanos, me emociona muchísimo —
Dijo con una gran sonrisa el dios japonés, su enorme euforia y tono fuerte, contrasto muchísimo con el siguiente dios que hablo.

— No me parece mala idea... Los humanos demostraron ser seres muy interesantes, y ver nuevamente a los dioses que perdimos, podría ser interesante –
Dijo el maldito por satanás, en su mente rondaban sus recuerdos con Hades y las palabras de Nikola Tesla durante su batalla. En la sala, mientras cada uno daba su opinión, se escuchó un fuerte suspiro de fastidio que corto el aire tan positivo sobre esa idea
— Me niego rotundamente, esos humanos no son más que una plaga y un fastidio, me niego a verle de nuevo la cara a ese desgraciado —
Dijo el dios del sol egipcio. Había sido elegido para luchar pues había una vacante en la lista divina. Su duelo había sido contra Grigori Rasputín, al cual el dios odio con toda su alma

— Yo no veo problema. La Humanidad ha logrado despertar mi interés, es una raza con seres muy interesantes —
Dijo el dios del trueno nórdico manteniendo sus ojos cerrados

— Muy bien, la decisión está tomada. Se les permitirá a los caídos en batalla revivir, eso incluye a los humanos y sus Valkirias —
Dijo el dios padre del cosmos con un tono juguetón

Y por eso odio que Buda tuviera
Que traicionar a los dioses, mientras escribía me dió una crisis existencial pues las cuentas me volvieron loco, o añadía a Ra o Rasputín quedaba sin luchar pero al mismo tiempo al añadir a Ra no me dan bien las cuentas

En fin, espero que les guste el capítulo, nos vemos la próxima