Encargo ♥︎ Jikook

01

—¡HyeJin! ¡No puedes-!

Al mirar la cara de súplica de su amiga, solo pudo suspirar, sabiendo que no tenía opción y sea como sea terminaría accediendo ante las súplicas de la omega. Tomó al niño de dos años con sus manos haciendo una pequeña mueca, sosteniéndolo como si fuera una cosa extraña, alejándolo de su cuerpo, como si no fuera de este mundo, aunque para JungKook en parte lo era, podía ser un omega y todo lo que quisieran, pero en definitiva sentía que no congeniaba con los niños.

Examinó al cachorro, quien movía sus pequeñas piernas mientras chupaba su mano y le miraba con los ojos muy abiertos, bien, parecía no querer dormir en lo absoluto.

¡Muy bien!

—Solo será por esta noche, Kook, por favor ¡Este tipo es verdaderamente increíble!

—Eso has dicho de los últimos 4.

Ella trabó los ojos, y miró a su bebé antes de darle un pequeño beso en su mejilla y mirar a JungKook, sonriendo de manera inevitable al mirar su cara entre súplica y enojo por dejarle una responsabilidad que en lo absoluto le gustaba, pero no tenía opciones, la niñera le había cancelado a último momento.

—No te morirás por cuidarlo unas horas, mi Sujo es muy tranquilo. —Le pellizcó la mejilla a su cachorro, JungKook solo pudo hacer otra mueca al mirar al bebé babear.

—Sabes que no nos gustan los niños.

—Lo sé, aunque nunca siquiera han intentado convivir con uno, podrían sorprenderse. —Elevó sus hombros con media sonrisa, antes de cerrar la puerta, dejando a JungKook con las palabras en su boca.

Este chasqueó la lengua, y miró al cachorro en sus manos, este parecía muy entretenido mirando el collar en su cuello, y al verle las intenciones de tomarlo, JungKook abrió sus ojos y tomó su pequeña mano que se estaba extendiendo a su cuello con dos de sus dedos, evitando que siquiera lo tocase.

—Oh no, ni se te ocurra.

Aunque de igual manera el bebé fue más rápido y terminó tocando el pequeño dije de flor que tenía la cadena de plata con una risa, JungKook solo suspiró y caminó hacia la sala de estar.

Sentó al bebé en el sofá, y se paró frente a él, examinándolo mientras cruzaba sus brazos, y desviando su vista a la pequeña pañalera que había dejado su amiga en otro de los sofás, con cosas que según sus palabras, el pequeño necesitaría, oh, iba a matarla, en definitiva, en especial porque llegó justamente cuando estaba en algo muy importante.

Cuando tenía a JiMin, muy, muuuuy adentro.

Bueno ¿Y ese alfa dónde estaba?

—¡JiMin! —le llamó, ah, él no iba a dejarle toda la responsabilidad.

A los pocos segundos, JiMin se asomó detrás de una pared, elevando una ceja al mirar que JungKook estaba viendo el sofá con mucha atención, olfateó el aire, y un olor extraño, fuera de él exquisito olor a caramelo de su omega le llenó los pulmones, olor a leche materna.

Elevó sus cejas, y avanzó, colocándose a la par de JungKook, y abriendo su boca al notar a un bebé regordeto, chupando su mano y mirando ahora a ambos con suma atención.

—¿Pero qué...?

—HyeJin. —Respondió, mirando a JiMin de reojo.

JiMin se arrodilló frente a el sofá, y miró al bebé con mucha atención, el bebé por alguna razón se rió, y llevó su pequeña mano desocupada a su cara, JiMin se quedó muy quieto, y se alejó de golpe al sentir como el cachorro le tomaba de la nariz y tuvo la intención de apretarla.