¿Por qué el Santo Hijo es tan delicado?

Capítulo 69

Después de despertarse, Pei Xia pateó la estatuilla del Dios de la Luz, que se había caído al suelo, debajo de la cama con remordimiento de conciencia. La tenía en la mano antes de dormirme. Después de dormirme, probablemente me di la vuelta demasiado a menudo, y la pequeña estatuilla cayó al suelo.

Soñar ese tipo de sueño delante de la estatua sigue siendo con un demonio... ahhh, no importa lo espeso que sea Pei Xia, todavía se siente un poco culpable.

Después, Pei Xia cargó sus pantalones con cierta angustia y se puso de puntillas para buscar agua para lavarlos. No había manera. No trajo muchas cosas consigo cuando escapó, y actualmente no hay ropa de repuesto.

Si es suciedad ordinaria, puedo soportarlo durante un tiempo, pero esto... tos, tengo que lavarlo.

Después de lavarse, Pei Xia se puso los pantalones mojados y empezó a pensar en la vida en esta desolada iglesia abandonada.

Se arrodilló ante la alta estatua con grietas, juntó las manos delante de él, inclinó ligeramente la cabeza y la expresión de su rostro era muy piadosa:

"El gran **** de luz, ese demonio realmente irrumpió en mi sueño, y está sacudiendo mi fe. No me aferré a su devoción creyente por un tiempo, y no tengo ninguna intención de ceder. Por favor, ¡que la luz me bendiga! "

"¡Ah, si tengo que soñar con él, que me despierte como anoche!"

"Está bien estar despierto, al menos controlo el contenido de mis sueños".

"Si no, me da miedo la insuficiencia renal..."

No lo menciones, cuando me desperté esta mañana, mi cintura se sintió débil por un tiempo, y Pei Xia casi se cayó.

Pei Xia reflexionó y no pudo evitar recordar el sueño de anoche. Aquel sueño era muy real, todo en el sueño era muy claro, y Pei Xia aún podía recordar todos los detalles.

Incluido lo que decían y lo que hacían.

Demasiado depravado, pero afortunadamente, sólo era un sueño.

Pei Xia pensó que sí, que un sueño no debía tomarse demasiado en serio, pero las palabras que Lucifer dijo en el sueño le impidieron dejarse llevar.

Le dijo que le dejara ir con él y le dijo que se lo contaría todo.

Estaba claro que se trataba de un sueño, pero Pei Xia seguía teniendo ganas de volver y echar un vistazo.

¡No, no, no! Pei Xia sacudió bruscamente la cabeza, levantó la mirada y se encontró con el Dios de la Luz con ojos bondadosos. No pudo evitar recordar la escena en la que Lucifer salía del Dios de la Luz en su sueño de anoche.

En su corazón, ¿sólo suspiraba por él, anhelando encontrar soluciones y explicaciones a todos sus problemas?

Pero ahora, Pei Xia también sabía claramente que si volvía solo, no sería tan fácil escapar.

¡No puede volver!

... Una hora más tarde, Pei Xia, envuelto en un trapo hecho turbante, se acercó sigilosamente al patio original desde las calles y callejones.

Declara solemnemente que no tiene intención de volver.

Era muy simple: Primero, no podía preocuparse por Buck y los demás, y quería ver si Lucifer los había enfadado. Segundo, acechar en secreto, buscando las pruebas y debilidades del asesinato de Lucifer a los demás. Tercero, el lugar más peligroso es el más seguro.

Sí, así es, eso es, ¡absolutamente nada más!

Pei Xia compró algo de comer con las monedas que había sacado con antelación. Con un trozo de pan en la mano, se acuclilló en un rincón escondido, mirando al patio mientras comía.