Soleil Et Lune

Capitulo Uno

Era una noche tranquila de primavera. Un joven camina por un campo de flores mientras canta una canción que él mismo había compuesto. El joven no se da cuenta de que una mujer de cabellos blancos lo está observando, escuchando la hermosa melodía que crea con su voz.

El joven Omega deja de cantar y finalmente se da cuenta de que alguien lo está viendo. Comienza a buscar a su alrededor y logra distinguir a alguien presente.

-Princesa Rhaenyra -dice mientras hace una reverencia- No sabía que se encontraba aquí.

-Tienes una hermosa voz -comenta mientras se acerca a él- ¿Cómo te llamas?.

-Soy Gwayne Lannister, princesa -responde el Omega con la cabeza agachada, escuchando los pasos de Rhaenyra acercarse a él.

-En ese momento, Rhaenyra toma el mentón del joven y lo hace levantar la cabeza para poder verlo a los ojos- Eres el hijo de Raiden Lannister.

-Si soy su hijo, princesa -Gwayne estaba nervioso y evitaba la mirada de Rhaenyra- Su primer hijo menor.

-Así que su primer hijo menor -Rhaenyra suelta al Omega del mentón- ¿Ya estás casado?.

-No, aún no, princesa -responde mientras baja la cabeza.

-Pues pronto lo estarás -Rhaenyra echa una última mirada a Gwayne y decide irse.

Gwayne no dice nada y simplemente levanta la cabeza para ver cómo la princesa Heredera se marcha. Él realmente no había entendido esas palabras. Después de todo, solo era un joven de 14 años y Rhaenyra una mujer de 20 años. Gwayne decide quedarse un rato más en el prado de flores, ya que un no era tan tarde.

Mientras tanto, Rhaenyra ya había decidido que Gwayne Hightower sería su esposo, por lo que sabía lo que le diría a su padre, quien le había instado hace tiempo a casarse de una vez. Mientras camina por los pasillos, Rhaenyra se topa con su hermano Baelon, quién estaba teniendo problemas con una doncella.

-Baelon -llama Rhaenyra a su hermano menor- ¿Qué sucede?.

-No es nada, solo trataba de hablar con esta doncella, pero ella insiste en seguirme a todas partes -dice mientras mira a su hermana- No necesito a una niñera.

-Sabes que madre quiere que tengas a alguien de confianza a tu lado para que te cuide -Rhaenyra muestra una expresión tranquila mientras lo observa- Es por tu bien, hermano.

-Aun así, no me gusta que esté siguiéndome a todas partes -Baelon mira a la mujer- Que sea un Omega no quiere decir que esté en peligro siempre. Si tan solo me dejaran usar la espada, estaría mucho mejor.

-Un Omega no va a la guerra. Un Omega solo debe estar en su hogar, cuidando a sus hijos y esperando a que su esposo o esposa regrese -dice mientras ve cómo su hermano se molesta- Eres un Omega, Baelon, tienes que hacer eso, tienes que seguir las reglas.

-Sabes, creí que serías diferente. Pero eres igual que padre. Que tú y padre sean alfas no les da el derecho de decidir lo que tengo que hacer -dice con molestia mientras mira a su hermana- Con tu permiso, hermana, me retiro.

-Baelon, espera -en ese momento Rhaenyra ve cómo su hermano la ignora y simplemente se marcha con su doncella siguiéndolo- Genial, Rhaenyra, te las mandaste.

Rhaenyra solo suspira y decide continuar su camino. Baelon era un Omega como su madre (Viserys), por lo tanto, el trato que recibían era muy diferente al que ella recibía por ser una alfa como su padre Daemon. En realidad, Rhaenyra sabía que se equivocó, por lo que tendría que disculparse, pero eso sería después de hablar con su madre y su padre, si es posible.

Mientras con Gwayne

Él estaba en la habitación que le habían asignado por ser el hijo de Raiden Lannister, su padre, el Consejero de la Moneda del Rey Daemon Targaryen, hace unos cinco años. Antes no estaba allí, vivía con su madre (Otto), antes de venir a vivir con su padre. La verdad es que se sentía solo sin sus hermanos y sin su madre. El omega se recuesta y mira el techo.