Mi Cuba, ese pedazo de tierra en el mar Caribe, como muchos la describen, tierra de tabaco, Ron, playas, hoteles medio vacíos, putas y de las buenas, hambre, pobreza, corrupción y de la buena también, mucho ingenio y sobre todo ese querido amigo por más de 63 años causante de nuestros males, el comunismo, islita con gran potencial, pero mal utilizado, o mejor dicho mal repartido, aquí estaba yo, Esteban, un simple ortopedico de este macabro sistema, a mis 28 años no había logrado mucho, al no ser tener mi título de medicina y luego de mi especialidad, trabajo para lograrlo;mucho, amor por mi profesión de sobra, problemas que me resuelve digamos que ninguno, mi salario es una pinga, hablando en buen en cubano, sobrevivo en gran parte de los que algunos pacientes quieran regalarme, dios mi sistema, que sistema que le da más a quien menos hace, fomenta la corrupción, te obliga a no estudiar o dejar los estudios para tener más dinero, pero bueno no seré yo quien arregle esto, pues como decía, aquí está un comemierda de 28 años ortopedico y muerto de hambre intentando sobrevivir a todo esto, cada día sueño con poder irme de está mierda, pero dios se ensanño tanto conmigo que ni un tío me puso del otro lado del mar, por tanto patrocinio ni pensarlo, y de que sirve ser reiterativo si no me alcanza para el mes menos para salir de esta hermosa prisión. Pero nada sobrevivo, o eso intento a diario como la mayoría de todos los que quedamos en este maldito país, si; hoy ando medio reflexivo o tal vez comemierda, o será que por primera vez en mucho tiempo tengo tiempo en una guardia para tontear así, en fin trabajo en ese monstruo sin dientes pero capaz de tragarse a cualquiera que dicen es un hospital, su nombre mejor me lo reservo, esa céntrica mole ubicada en el medio del municipio 10 de octubre y que atiende a lo mejor y más capaz de toda la Habana, ya eran las 2 AM estaba intentando dormir y en espera que mi residente me llamara, me habían puesto en la guardia uno de primer año que el pobre le queda tanto que aprender, pero nada que se joda y se crezca en consulta como lo hice yo, al final me jode a mi tambien, pues me llama hasta para dar una receta de dipirona.
Suena el celular.
Y bien ahí está, había tardado mucho.
Descuelgo.
- dime.
- profe es Mario tenemos una urgencia si pudiera bajar por favor.
-esta bien Mario enseguida bajo.
Me levanté con pocas ganas de la cama, me dirigí rápidamente al elevador y bueno el único que funcionaba abrió sus puertas delante de mí con un chillido que daba miedo entrar en el. Apreté el botón de planta baja y espere hasta que aquella puerta infernal emito nuevamente aquel ruido indicando que llegaba a mi destino, salgo y me dispongo a caminar al cuerpo de guardia, veo a uno de los cirujanos que rápidamente me grita, es un politrauma, rápido, que está todo descojonado, este es el momento que pienso y digo que cojones estoy haciendo con mi vida, debería estar en un bar sirviendo copas, follando extranjeras y ganando Miles en vez de comer está mierda, en lo que pensaba ya mis pies iban corriendo, llego al lugar y me encuentro con un río de sangre en el piso, varios doctores de especialidades diversas, enfermeras y estudiantes alrededor de una camilla y por encima de todos uno reanimando, y entre más reanimaba más sangre salía, otro lo veía intentando intubar, no se mucho de eso si no hay huesos de por medio nada que ver conmigo, me dispongo acercarme para ver si tenía algo de mi especialidad y de pronto pues.
- Que nadie se mueva ni pingaaaa, este es un singao que le dió a mi jeva y se muere aquí - acababa de entrar un carismático personaje a pleno cuerpo de guardia acompañado de varios folklóricos como el y machete en mano.Solo se que entre la familia del herido y de los justicieros empezó una gran riña, lo último que recuerdo es ver venir volando hacia mi una botella que me dió en el medio de la frente y en lo que perdía el conocimiento sólo podía pensar, menudo día de mierda acaba de empezar para mí.
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Esteban en el fin del Mundo.
RandomEsteban es un joven médico cubano que a diario vive los pesares del sistema político en el que le tocó vivir, hambre, pobreza y represión son el pan de cada día, sin muchas esperanzas de que su vida mejore y lograr salir de Cuba su único refugio es...