Al entrar a mi casa no sentía ningún ruido, cómo ya era de costumbre para mí, lo raro era que apenas eran las 4:00 de la tarde y era imposible que mi hija ya descansará ya que ella no solía dormir en las tardes aunque su madre se lo implorara.
Dejando mis cosas en el sofá de la casa junto a mis tacones -como ya era rutina- empecé a caminar por mi casa buscando a mi esposa o mi hija, por unos segundos pensé en que quizás habían salido pero esa idea desapareció cuando al estar en el segundo piso de mi casa pude ver atraves de la ventana de la habitación compartida con mi mujer a mi pequeño orgullo y a mi gran orgullo - mi esposa y mi hija- en la piscina de nuestra casa.
Una sonrisa en mi rostro se pinto y en menos de 15 minutos ya estaba bajando al patio de mi casa para poder estar con mis dos mujeres.
Entre al patio y sin siquiera darme tiempo a anunciarme el grito de mi hija se escuchó.
¡Mamá!- grito emocionada corriendo hacia donde yo estaba.
Princesa.- dije con ternura mientras la levantaba para poderla abrazar, si seguía haciendo este tipo de cosas con ella a pesar de que ya no era tan pequeña, ella tomo mi cara con sus manitas para dejar un beso en mi nariz que me hizo arrugar la cara por la sonrisa aún más grande que llegó después.
¿Yuri?,¿qué haces aquí?.- baje a mi hija para por fin poner mi mirada en la mujer más alta que me miraba fijamente desde la orilla de la piscina.
Llevaba un caliente traje de baño negro que solo cubría lo esencial, se veía exquisita con el.
Y sin el aún más- pensé.
Regrese más temprano para ayudarte a hacer las maletas para el viaje de mañana.- me encogí de hombros con una sonrisa.
¿Y el trabajo?.- cuestionó mi esposa un poco asombrada por mi cambió de opinión.
¡Que se jodan!.- dije jocosa.- mi esposa y mi princesa es más importante que cualquier empresa.- me agaché a la altura de mi hija que aún seguía delante de mí pero ahora con una galleta que había tomado de la mesa.- ¿No es así mi princesa?.- mi hija asintió con una gran sonrisa.
En ese momento sonó mi celular y me reincorpore para sacarlo del bolsillo de mi pantalón.
Es Michael, le dije a Verónica que le dijera que se comunicara conmigo para decirle de que se debe encargar en mi ausencia.- hablé en voz alta para que mi esposa escuchará.
Amor, se que haces esto porque me enojé pero no tienes que descuidar tu trabajo por este berrinche, podemos ir luego.- negué.
Tienes razón, debo estar más al pendiente de ustedes y de mi, mi trabajo me está acabando y eso no está bien.- explique.- además, tengo muchas ganas de jugar poker con eduard.- mi esposa puso los ojos en blanco divertidas y sin más me aleje de mi esposa e hija para atender la llamada.
Michael.-
Ojeda.- respondió con el mismo tono serio atraves de la línea.
Estaré fuera de la oficina algunas semanas necesito que te quedes a cargo.- lo dije más como una orden que como una petición.
Sabes que no me gusta estar en la oficina, no nací para eso.- suspiró.
No me importa, es hora de que seas un verdadero hombrecito y te pongas los pantalones acabas de cumplir 25 años, cumple tu deber.- hablé con un tono más severo.
Yuri sabes que ese tipo de trabajo no me va, por eso papá te dejo la empresa a ti antes de morir.- sostuve el celular con más fuerza, sentía que si lo apretaba un poco más podía explotar en mis manos.
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La Chica De Vestido Negro-YULERIA
RomanceInspirado en la canción "La diabla"- Aventura.