•ÉL•

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Él simplemente llega y me pone a creer en los reencuentros, en las segundas veces, en los segundos intentos. Me hace creer en que sí se puede llegar a buen puerto, aunque el barco haya quedado varado ya una vez, porque sí es posible reparar aquello que no funcionaba y retomar la marcha desde donde se había dejado.
Me pide que cierre mis ojos y confíe, y lo hago, y me vuelvo a lanzar por el mismo acantilado que encontré vacío ya una vez, con la firme certeza de que esta vez habrá un mar esperándome abajo. Reemplaza mi orden, mis estructuras y mis planes, por caos, locura e incertidumbre.

Él, él definitivamente me tiene.

•45 VIDAS PASADAS•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora