Capítulo 5: La confesión

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Después del beso, George y Toto se sentaron de nuevo, mirándose a los ojos con una sonrisa.

"¿Qué pasa?", preguntó Toto, riendo. "Pareces como si hubieras visto un fantasma".

George se encogió de hombros. "No sé", respondió. "Me siento solo... diferente".

Toto se inclinó hacia adelante. "Diferente de qué manera?", preguntó, su voz llena de curiosidad.

George dudó por un momento antes de responder. "Me siento como si hubiera encontrado algo que no sabía que estaba buscando", dijo finalmente.

Toto sonrió. "Creo que sé a qué te refieres", dijo. "Me siento igual".

Hubo un momento de silencio entre ellos, y luego Toto habló de nuevo.

"Quiero decirte algo", dijo, su voz seria. "Algo que no le he dicho a nadie en mucho tiempo".

George se inclinó hacia adelante, intrigado. "¿Qué es?", preguntó.

Toto respiró profundamente antes de responder. "Me gustas", dijo finalmente. "Me gustas mucho".

George se sintió sorprendido, pero también aliviado. "Me gustas tú también", respondió, sonriendo.

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