UNA CORTA, PERO ENTRETENIDA HISTORIA DE NAZ, QUIEN COMO TODOS LOS DÍAS TOMA EL TREN PARA IR A SU TRABAJO, PERO ALGO MUY INTERESANTE LE SUCEDE ESA MAÑANA.
-Cógeme -, digo, y luego siento que mis mejillas se iluminan, probablemente adquiriendo el mismo tono de rojo sangre de buey opaco que la tapicería descolorida del asiento que está acariciando distraídamente mientras me mira. Levanta una ceja un poco como si estuviera considerando seriamente mi oferta. -Cógelo-, me corrijo y le disparo mi mejor sonrisa de "no soy una tonta torpe esta mañana" , aunque ambos sabemos que quise decir exactamente lo que dije, aunque hubiera sido más sabio si las palabras se hubieran quedado dentro de mi cabeza. Le había entregado la ventaja a los tres segundos de conocerlo, un error que había cometido varias veces antes y del que me había comprometido a aprender.
Sin embargo, así soy yo en todo; seguir haciendo lo mismo y esperar que los resultados sean diferentes, lo que incluso yo puedo ver que es la acción de un idiota.
-Soy Naz, recién coronada reina de decir lo incorrecto en el momento incorrecto -digo alegremente, porque él se ha deslizado en el asiento frente al mío y todavía me mira fijamente. Sus ojos son curiosos; me recuerdan a un cóctel de café intenso que tomé en la playa de Ibiza hace algunos veranos, o a unos Levi's oscuros, pero desgastados que piden a gritos que tu amante los desabroche.
- Reina Naz. -Inclina la cabeza formalmente-. Soy Jin, rey de las malas intenciones.
Miro hacia la mesa del otro lado del pasillo, segura de que debemos estar proporcionando entretenimiento a los demás pasajeros. Los veo, las mismas personas que he visto casi todas las mañanas de los días laborables durante el último año más o menos; el señor de los cabellos de mala mañana, con la nariz enterrada en las páginas de negocios del periódico, el que hace tiempo que decidí que es el compañero de viaje matutino con el que me acostaría si tuviera que jugar a "hacerle daño a alguien o morir" en este tren. En lugar de Santa Claus, el anciano sentado frente a él, que a pesar del apodo perezoso que le he dado por su barba blanca demasiado larga que parece usar para atrapar los derrames de sopa, es en realidad un viejo cascarrabias la mayor parte del tiempo con más que un tufillo a la camisa del día anterior, es más bien él.
King Jin y yo estamos en el otro extremo del vagón. Un rápido giro en mi asiento para mirar hacia el pasillo me dice que todo es como siempre más allá; que a nadie le importa en lo más mínimo la coronación que acaba de ocurrir detrás de ellos en el tren de las 8.10 hacia Birmingham Grand Central.
-He tomado este tren mil veces y nunca te he visto-, suelto, como para confirmar que de hecho soy incapaz de controlar las palabras que salen de mi boca.
¿Acaso él? ¿Ha puesto algún tipo de suero de la verdad en la taza de café de cartón que está sobre la mesa frente a mí, o me ha hipnotizado con su mirada azul cómplice?
Dios, espero que no. ¿Y si es sádico y me hace arrojarme del tren? El maldito Edu y Sandra, la zorra de la oficina, pensarían que me he arrojado a mi dramática muerte por culpa de ellos y de su sucio baile de twerking. ¿Quién hace eso vestido de elfos? Estaban a un clip viral de YouTube de arruinar la Navidad a los niños de todo el mundo, un par de perros rabiosos irresponsables.
-Sé que te recordaría-. Junta las manos sobre la mesa entre nosotros.
Me pregunto si es posible tener un orgasmo solo con el sonido de la voz de alguien, porque la suya está haciendo cosas raras en mis bragas. Tengo calor y estoy excitada, y estoy mirando esos dedos capaces y unidos y deseando que abran los botones de mi abrigo de invierno de lana azul. Y luego mi blusa. De hecho, no creo que me quejaría si me desnudara y me follara sobre la mesa defórmica desportillada que hay entre nosotros.
Inconscientemente muevo mi café hacia la ventana por si acaso mientras me devano los sesos para recordar si mi sujetador combina con mis bragas, porque es totalmente posible que esos ojos láser ya hayan visto a través de mi ropa. Mis pezones se endurecen ante la idea de que me mire así.
¿Qué diablos estoy haciendo? O más concretamente, ¿qué me está haciendo?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Corta nueva historia, se siente bien volver a lo mío. Gracias por leer. Besos voladores 😘 27/07/2024._
