ʚ𝗨́𝗡𝗜𝗖𝗢ɞ

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La paz entre el segundo Paraíso y el segundo Infierno estaba inestable, por décadas si quiere presumir, pero el príncipe ángel encargado Taehyungkinhad opta por ignorar que es el único reino de los cielos que no tiene lazos cordiales con su parte ...

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La paz entre el segundo Paraíso y el segundo Infierno estaba inestable, por décadas si quiere presumir, pero el príncipe ángel encargado Taehyungkinhad opta por ignorar que es el único reino de los cielos que no tiene lazos cordiales con su parte infernal. Jamás intentaría dialogar con el príncipe demonio encargado de ese inframundo Jungkookazhande, era la peor escoria que conocía y el sentimiento de repudio en un ángel era casi nulo.

Lo ignoraría por la eternidad, seguro que lo haría, hasta que ese día los ángeles A6235789 y A89936478 llegaron a su palacio gritando con sus voces melodiosas que los demonios invadieron su jurisdicción. El príncipe ángel jadeó sintiendo las punzadas de estacas por todo su cuerpo con el único hecho de tener que deshacerse de más juguetes de Jungkookazhande. Salió con su vestido blanco por las puertas y caminó afuera de su palacio de cristal hasta mirar el caos personificado, un demonio grande con sus seis alas intimidantes y los ojos rojos llenos de almas con lamentos en ellos.

—Mi adorado, príncipe —se cruzó de brazos mirándole sin ningún temor, no como sus ángeles que se refugiaban en los pliegues de su falda.

—Vete ahora, Jungkookazhande estoy muy ocupado.

—Qué impredecible —murmuró jugueteando con la cabeza que le arrancó a uno de los ángeles con las afiladas garras de sus grandes manos—. El príncipe ángel más laborioso ¿Y cuando vamos a solucionar nuestros problemas?

—Son inexistentes —afirmó—. Regresa esa cabeza a su sitio.

—¿Y qué si no?

—Te castigaré, sé que adorarás los castigos de mi paraíso —el demonio sonrió mostrando sus afilados dientes.

—Yo sí sé que rogarías por un castigo divino de mi parte, Taehyungkinhad, aunque inmortal morirías por ellos.

—Eso es lo que crees —gruñó caminando hasta el demonio y una vez frente a frente lo cogió por el cuello con fuerza, los ojos rojos se resplandecieron y su mandíbula vaciló ansiosa, pero los cristalinos ojos del ángel lo tranquilizaron mientras que las afiladas uñas se clavaron en la caliente piel del demonio hasta que drenó la venenosa sangre negra—. Te ordeno Jungkookazhande, que mantengas tu posición donde corresponde. Retarme no nos llevará a más que un castigo divino que no te va a gustar, te encantará. No me provoques que hemos estado en calma mucho tiempo, pero ya me he cansado de los juegos insistentes de tus estúpidos demonios, quiero que te largues ahora a tu infierno, y no subas a mi reino si no te lo ordeno —el agarre se volvió más fuerte mientras que la sonrisa endemoniada de Jungkookazhande se esparcía con lujuria y satisfacción de provocar a su contraparte a la maldad.

—A los príncipes ángeles les encanta ir por ahí mostrándose benévolos y siervos, pero solo son eso, esclavos —Taehyungkinhad sentía la sangre escurrir de sus dedos a su brazo y odiaría mancharse el vestido de negro. Pegó su frente con la del demonio de ojos rojos y lo miró fijamente.

𝐎𝐧 𝐄𝐚𝐫𝐭𝐡 𝐀𝐬 𝐈𝐧 𝐇𝐞𝐥𝐥 ♡ 𝑲𝒐𝒐𝒌𝑻𝒂𝒆 ᴏʀɪɢɪɴᴀʟDonde viven las historias. Descúbrelo ahora