Tres años de guerra finalmente habían culminado con la derrota de Madara, junto con el grupo de ninjas renegados akatsuki, pero el costo a pagar para la victoria había sido demasiado alto. El mayor héroe de la cuarta guerra, y sexto hokage, Uzumak...
¡Necesitamos refuerzos! – Gritarían muchos marines con temor, ya que eran derribados por dos piratas
???: Maldición ¿Quiénes están tan locos o estúpidos como para invadir Enies Lobby? Y peor aún ¿Cómo es que no se pueden hacer cargo de esta absurda invasión? – Gritaría alguien con furia, para después gritar de dolor porque se le había caído el café encima
Naruto escucharía el den-den mushi, y no podría evitar que una gota estilo anime se le formara en la cabeza ¿Quién era el estúpido que hablaba? Esperaba que no fuera el líder de este lugar, porque de otra manera comenzaría a sentir algo de lastima por crear tanto caos.
Luffy: Disculpen ¿Nos dejarían pasar? – Les pediría amablemente a los marines que custodiaban una de las puertas que dirigían a una zona urbana de la isla
Marine: Aunque lo pidas educadamente, si digo que no ¡ES NO!
El marine se lanzaría empuñando una lanza, pero sería rápidamente detenido por Naruto, quien de un golpe lo manda a volar a donde se encontraba el resto de sus compañeros
Naruto: Queríamos hacerlo por las buenas, pero veo que no quieren cooperar muchachos
Luffy y Naruto derribarían con bastante facilidad a los marines que resguardaban la puerta. Luffy les lanzaría una lluvia de puñetazos, mientras que Naruto usaba su katana para derrotar a los guardias, quienes iban muy bien armados
Naruto lograría llegar a donde estaba la puerta, y comenzaría a caminar sobre esta, dejando incrédulos a los guardias
Naruto: ¡Luffy! – Le gritaba, mientras extendía la mano
Luffy estiraría su brazo y tomaría la mano de Naruto
Luffy: Disculpen, pero tenemos prisa, tal vez nos volvamos a ver las caras – Les gritaría a los marines que se encontraban mirándolos incrédulos
Ambos entrarían a la isla principal, pero al cruzar al otro lado se encontrarían con una sorpresa
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Oimo: Vaya, vaya, yo que estaba durmiendo tan tranquilamente
Karsee: Que molestia ¿En serio debían invadir a esta hora?
Ambos gigantes los mirarían con un poco de curiosidad al dúo de intrusos
Luffy: Maldición, así que gigantes – Diría, mientras se preparaba para atacar
Naruto: Espera Luffy, tengo una idea – Diría, provocando que el del sombrero se detuviera
Los gigantes estaban a punto de atacarlos
Naruto: ¡Kuchiyose no Jutsu! – Gritaría, mientras dos columnas gigantescas de humo aparecían, de las cuales saldrían dos gigantescos sapos
Gamahiro: Me alegra volver a verte Naruto, pero no esperaba que fuera en una situación como esta – Diría el sapo de color aguamarina
