Alea.Aquí estoy una vez más
Un tratamiento más...
Un dolor más...
Estás ganas incesantes de salir corriendo y olvidarme de los males que suceden en mi vida. Pero aquí estoy, manteniendo una fortaleza por alguien que desde el día que se enteró de mi diagnóstico ha estado para mí.
Pero ahora me pregunto yo, ¿Vale la pena vivir por otra persona? ¿Vale la pena estar en un mundo donde todos bajan la cara cuando se enteran de lo que tienes, de lo que padeces, de lo que te pasa? ¿Vale la pena vivir por vivir y no hacerlo verdaderamente porque quiero?. Estoy en esta situación desde que tengo uso de razón, he tenido altas y bajas, más bajas que altas, Pero de una u otra manera he intentado mantenerme y estar con fuerza para las personas que verdaderamente quieren que yo siga aquí. Soy insensible, renuente, terca, un poco caprichosa y muy malhumorada. Pero lo que las personas no saben es que tengo un buen corazón, deteriorado pero lo tengo. De que me levanto día tras día con la esperanza de que toda esta tormenta acabe, de que me digan que estoy bien, que estoy sana, que puedo vivir mi vida con normalidad, salir a la calle a celebrar, beber, conocer personas, sentirme en un hogar y no ser lo que soy hoy en día, una persona fría enferma y a punto de morir.
Y aquí estoy, en la misma banca. De hecho puedo decir que la conozco más que a mí misma, su textura sigue siendo la misma, fría pero de una u otra manera reconfortante. Después de cada sesión vengo y me siento aquí simplemente a ver a las personas, los árboles,
Las pocas aves que pasan por aquí, hasta que llega un momento y digo; Es hora de regresar a casa, bueno, sí eso se puede considerar un hogar o una casa.Estoy tan
Pérdida en mis pensamientos que no me percato que mi mejor amigo me vino a buscar levanto la mirada
Y lo veo sonriendo aunque es una sonrisa triste sin vida ni esperanza trata de sonreír para mí— Hey, una vez más deambulando? —Se acerca y me da la mano para que me levante y lo siga a su auto
— Solamente estaba admirando el paisaje
— Alea, te conozco lo suficiente para
Saber cuándo estás perdida en tus pensamientos, sabes que eso es muy malo. Una vez entras ahí es difícil sacarte así que por favor...— Lo sé, lo sé, estoy bien te lo aseguro.
Qué tal si vamos a comer algo rico? — le sonrió como una niña y el me sigue.Él es Xavier, mi mejor amigo, la persona que ha estado para mí desde hace muchísimos años, que me ha acompañado en mis procesos y nunca me ha dejado sola. Normalmente cuando estoy aquí él es el que me viene a buscar y siempre me lleva a hacer algo divertido con tal de que yo no piense demás
Al llegar a un café nos dirigimos a la mesa de siempre y me percato que Xavier tiene hematomas por todo su brazo derecho, él al darse cuenta baja su brazo de la mesa y ve a otro lado
Se lo que sucede con Xavier, y por más que trate de que escape y busque ayuda no me hace caso, quiero su estabilidad, es mi mejor amigo, mi hermano y mi cómplice. Siempre querré que su vida sea un poco mas ligera, así como él quiere que sea la mía.
Estamos en posiciones diferentes, yo tengo una enfermedad y él tiene su familia... A mí me jode el corazón y a él los problemas en el hogar.
— Hey — le digo para que preste atención a mis palabras — Yo estoy aquí, si? Siempre lo estaré, Pero no puedo decirte o obligarte a hacer algo que no quieres. Solo quiero ayudarte. Es tu familia y se que a pesar de todo la amas, Pero tienes que amarte a ti también, Xavier. Lo digo en serio.
— Alea, no quiero hablar de eso, se que te preocupas. Pero es algo que tengo que enfrentar solo.
Opto por no decir mas nada y esperar mi comida. Así pasamos todo el rato, en silencio.
Llega la hora de irme a mi casa y prefiero caminar, se que mi mejor amigo se molesta por la actitud que estoy tomando, pero estoy cansada de tratar de hacerlo entender que va a terminar muerto un día de estos y no lo entienda. Es cansino insistir tanto y no tener solución de nada. Quiero que esté bien, que este a salvó y sano, Pero como lo logro? No quiere dejarse ayudar por mi. No quiero que le pase nada malo, siento que me culparía si algo le llegase a pasar por culpa de su propia familia.
Al llegar a casa veo a mi mamá en la sala acomodando unos documentos. — ¿Cómo te fue? — pregunta sin siquiera mirarme a los ojos.
— Bien, siempre me va igual — por fin me ve a los ojos, Pero esa acción dura poco.
— Ok.
¿Ok?, eso es lo único que puede decirle a su hija que está a punto de colapsar? Definitivamente no entiendo donde quedó la mamá que siempre se preocupaba por su hija, que sin importar nada, ella iba hasta el fin del mundo con tal de que sus hijos estuvieran bien. Pero ya no es así.
Nada es igual.
Ella cambió.
Todos cambiaron.
Tal vez y soy la la razón de ese cambio, tal vez yo soy la culpable de esa actitud y esa distancia que tomaron.
Al fin y al cabo, solo sirvo para joderle la vida a los demás.
¿Será que mi concepto de amar es dañar?
No te tortures a ti misma, nada es culpa tuya.
Tu no elegiste nacer con una condición, y mucho menos heredarla. Solo paso y no eres culpable de ello.
Asi es, tengo una condición y espero se queden a saber cuál es y que le pasó a mi vida después de todo esto.
Soy Alea Wilson, y te doy la bienvenida a
" Constelaciones Heridas"
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Constelaciones Heridas
Teen FictionAlea solo quiere que termine el dolor, será él capaz de hacerla cambiar de opinión? O la hundirá de lo que ya está?