Capítulo 14

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Eva

Salí corriendo de casa. No sabia donde iba pero no me importaba, estaba enfadada con mis padres. Querían que me alejase de Dunkel, el chico que mas o menos fue mi primer amigo y me niego rotundamente a ello. En parte se debe a que el es un Shek y, media yo, también. Corría y corría sin rumbo fijo. Cuando estaba cruzando la carretera un coche no me vio y siguió acelerando. Me quede estática en el sitio. Si no hacia algo rápido ese coche me atropeyaria. Ni siquiera me di cuenta de cuando cerré los ojos y coloque una mano estirada tratando de detener el coche. Si, una idea genial, como si tuviera súper fuerzas o algo. Sin embargo funciono. Algo brotó desde mi mano y paso a mis dedos donde una luz cegadora detuvo al conductor. Parpadee varias veces sorprendida. El conductor del audi rojo estaba casi mas sorprendido que yo. Le dirigí una rápida mirada de disculpas y volví a correr esta vez, en dirección al parque. Cuando llegue me deje caer en uno de los bancos. Enterré mi cabeza entre las rodillas las cuales tenia abrazadas con mis brazos y comencé a llorar. Casi nunca lloraba ya que lo veía algo inútil e inmaduro pero, estaba comenzando a comprender lo que me estaba pasando con Dunkel y, simplemente no quería creerlo. Sentí la presencia de alguien sentarse junto a mi en el banco. Alce un poco la cabeza para encontrarme con Alanna que me miraba con una ternura que rozaba la dulzura.
-Hola- me sonrio- ven aquí- me rodeo con sus brazos atrayendome hacia ella.
Le devolvi el abrazo y me largue a llorar por largo rato sobre su hombro.
-Tranquila- susurro- Cuentame que te pasa Eva, te ayudare.
Negué con la cabeza.
-Ese es el problema- me seque las lágrimas que quedaban por mi rostro-no se que me pasa, no lo entiendo.
-Yo si se que te pasa, estas enamorada.
-No- sacudi mi cabeza- eso no es posible.
-Me temo que es la verdad, pero no te preocupes, es algo normal en la edad que tienes.
-Yo...
-No hay nada malo en enamorarse Eva, al contrario, es un sentimiento muy bonito, si lo compartes con la persona indicada.
-Dunkel no es el indicado para mi, creo que eso es lo que mas me afecta, el es un Shek completo, o al menos antes lo era y los Sheks...
-No- me corto Alanna- no digas que los Sheks no pueden amar, porque eso no es cierto. Tu padre es un Shek y ama a tu madre.
-Si, lo se, pero el no siempre fue un Shek- la mire fijamente a los ojos y ella aparto la mirada algo intimidada.
-Aun así, mi hermano a visto algo en ti que le fascina, estoy segura.
-Le fascina el que sea medio Shek medio unicornio.
-Eva se lo que digo, le gustas
-Tu si que le gustas a mi hermano- Sonreí pícaramente- ¿Y a ti?
-Es bastante atractivo- dijo algo indiferente- y esta muy bueno- me guiño un ojo.

Memorias de Idhún: ¿Romance a la vista?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora