El hombre dentro de la bestia.

¡Corre Wei WuXian!.

Wei WuXian corre desesperado, quiere huir, salir de esas malditas tierras . Lleva años aguantando lo mismo y piensa que si no lo hace ahora, no vivirá para otro día. Está agotado, sus patas tiemblan y en cualquier momento puede caer. Tiene hambre y sed, aún así no piensa en cazar para alimentarse, no hay tiempo ni oportunidad.

Detrás de Wei WuXian, lo sigue WanYin quien de vez en cuando mira hacia atrás. Persigue al lobo que está delante sorteando obstáculos tras obstáculos. Su mirada de ceño fruncido no la despega del lobo que le lleva la delantera.

Las orejas de Wei WuXian perciben como el viento es cortado, entonces lo sabe, son flechas. El lobo de pelaje negro azabache en su carrera empieza a zigzaguear para evitar ser alcanzado por los ataques, de ellos depende su vida.

WanYin sabe que las flechas no van dirigidas a su persona, por eso no se esfuerza en esquivarlas y continua con su carrera.

Es lamentable ver cómo el esfuerzo de Wei WuXian no es suficiente. Debido al agotamiento y que sus pulmones no logran llenarse de aire correctamente, un par de flechas se incrustan en uno de los muslos de su pata trasera.

Wei WuXian libera un doloroso aullido e inevitablemente cae de costado. WanYin al ver cómo el lobo negro cae, frena dando medio giro quedando de espalda a Wei WuXian en posición de ataque, liberando gruñidos de advertencia deja ver sus colmillos en lo que sus garras se preparan.

De pronto un lobo mas joven salta de entre los arbustos y WanYin lo atrapa de un mordisco directo en el cuello, zamarreándolo de una lado a otro hasta dejarlo herido e inconsciente, lo deja caer de un escupido.

Otro lobo aparece y WanYin también lo intercepta, pero este le da pelea y mientras eso ocurre aparecen dos lobos más que se van directo en contra de Wei WuXian a quien empiezan a atacar enterrándole dientes y caninos. Los aullidos del lobo son más fuertes y desesperados. El dolor al sentir como le atraviesan la carne es enorme y es frustrante no poder defenderse, quedarse hechado debido a que se siente fatigado.

Al escuchar el llamado de su hermano, WanYin sabe que debe tomar una decisión y se lamenta lo que va a tener que hacer. Pero entre matar a un discípulo de Yunmeng y ver cómo una vez más lastiman a WuXian, sabe lo que debe preservar.

WanYin hace uso te todo el poder espiritual disponible para dar un ataque certero y definitivo. Cuando siente que aquel lobo que le estaba distrayendo ya no lucha, le suelta del cuello dejando ver su hocico manchado de sangre. Sin esperar un segundo más corre para ayudar a su hermano en vistiendo al primero y mandando lo a chocar en contra de un árbol para luego girarse y agarrar entre sus dientes el cuello de aquel que muerde salvajemente a Wuxian y con furia rompe los huesos del infeliz que lástima a su hermano, dándole muerte.

- levántate.... - ordena WanYin, hablandole telepáticamente.

WuXian mira a su hermano con súplica y dolor, claramente se pueden ver las lágrimas de aquel animal perderse entre el pelaje.

- no lo pienses, no te voy a matar para aliviar tu sufrimiento - responde adivinando los pensamientos de WuXian - estamos cerca de las tierras de Gusu, cruza y estarás a salvó. Los Lan son una manada justa...

Con gran esfuerzo, debido a lo débil que se siente, el lobo negro logra ponerse en pies y cojear mientras camina.

Un par de látigos golpean el lomo de cada lobo, WuXian cae una vez más debido a que sus patas temblorosas no son capaz de sostenerlo. Por su parte, WanYin se gira solo para encontrarse con las leales sirvientas de su madre en su forma humana.

- ¿qué cree qué hace, joven maestro? - pregunta JinZhu azotando a los pies del joven con intención de apartarlo de WuXian.

- no puede quitarle la presa de entrenamiento a los jóvenes - reprocha Yinzhu - cuando regrese, será severamente castigado. Su madre está furiosa.