Capítulo 43.

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Jimin se despertó esa mañana con una extraña sensación de ligereza, como si una carga invisible se hubiera desvanecido durante la noche. El sol se filtraba suavemente por las cortinas de su habitación, llenándola de una luz cálida y reconfortante. Se estiró y bostezó, sintiendo una chispa de felicidad mientras recordaba la fiesta de Jackson de hace dos días. Había sido una noche increíble, y lo mejor de todo, no había pensado en Jungkook ni un solo segundo. Era un pequeño pero significativo avance.

Se levantó de la cama y se dirigió a la cocina, donde su madre le había preparado el desayuno. El aroma del café recién hecho y el pan tostado llenaba el aire, dándole una bienvenida reconfortante al nuevo día.

—Buenos días, mamá —saludó Jimin, sonriendo mientras se sentaba a la mesa.

—Buenos días, cariño. ¿Dormiste bien? —preguntó su madre, sonriendo de vuelta.

—Sí, muy bien, gracias.

Mientras comía, los recuerdos de la fiesta invadieron su mente. Recordó la música, las risas, y cómo se había sentido completamente libre y feliz por primera vez en mucho tiempo. Pero lo que más destacaba en su memoria era el beso apasionante que había compartido con Bangchan en el baño. El recuerdo de esos labios sobre los suyos, la intensidad del momento, casi lo dejaba sin aliento de nuevo. Bangchan había dejado una impresión profunda y todavía podía sentir la emoción de ese beso.

Sin embargo, una pequeña sombra de decepción se cernía sobre él. No le había pedido el número de teléfono a Bangchan, y ahora no tenía manera de contactarlo. Era frustrante pensar que quizás nunca volvería a verlo, especialmente porque además de ser un buen besador, Bangchan había demostrado ser gracioso y muy apuesto. Había una chispa entre ellos, algo que Jimin no había sentido en mucho tiempo, y lamentaba la oportunidad perdida.

Después de desayunar, Jimin se encaminó a la escuela con una mezcla de emociones. Mientras caminaba, trató de concentrarse en lo positivo. El hecho de que hubiera disfrutado tanto la fiesta sin pensar en Jungkook era un buen indicio de que estaba avanzando. Quizás no estaba completamente superado, pero estaba en camino de sanar su corazón roto.

La brisa de la mañana era fresca y revitalizante, y Jimin se permitió disfrutar del momento, con la esperanza de que cada día sería un poco mejor. Mientras entraba en la escuela, se prometió a sí mismo que aprovecharía cada oportunidad para ser feliz y seguir adelante, incluso si eso significaba dejar atrás algunos recuerdos y personas del pasado.

Jimin se dirigió a su casillero. Pero a medida que caminaba por los pasillos, no pudo evitar notar los murmullos que surgían a su alrededor, casi como un eco constante. Sus compañeros lo miraban con curiosidad y una pizca de malicia en sus ojos. La sensación de incomodidad se intensificaba con cada paso, cada mirada furtiva y cada susurro que escuchaba a medias, captando su nombre en repetidas ocasiones.

Intentó ignorarlo, concentrándose en la tarea sencilla de guardar sus libros en el casillero, pero la atmósfera opresiva le hizo imposible mantener la calma. Cerró la puerta del casillero con un golpe más fuerte de lo necesario y se dirigió a su primera clase del día, tratando de sacudirse la sensación de ser observado.

Al entrar en el aula, la escena se repetía. Sus compañeros susurraban y miraban en su dirección, algunas risitas sofocadas se oían de vez en cuando. Jimin mantenía la cabeza alta, intentando no mostrar que aquello le afectaba, pero en el fondo sentía cómo su estómago se revolvía con cada mirada y cada comentario. Se dirigió a su pupitre, ubicado a unas filas del frente, y trató de ignorar todo a su alrededor.

Sin embargo, su corazón dio un vuelco cuando sus ojos se encontraron con los de Jungkook. Su ex novio estaba sentado a unos bancos de distancia, con una expresión de furia contenida y desdén. Sus ojos, que alguna vez le habían mirado con tanto cariño, ahora solo mostraban una mezcla de desprecio y dolor. Jimin sintió una punzada en el pecho, pero desvió la mirada rápidamente, decidida a no dejarse afectar. Ignoró deliberadamente a Jungkook, concentrándose en el profesor y tratando de bloquear los murmullos y miradas que sentía como agujas en su piel.

Team Heterosexuales ➳ KookMin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora