CAPÍTULO 34

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NARRA MADDOX

—Derin—su hermana exclamó, abrazándola—. ¿Estás bien?

—Estoy bien.

—Der—Isobel hizo lo mismo—. ¿Y Pax? —ella cuestionó.

Rodé los ojos.

—Seguramente fui yo a quien más extrañaste —él dijo, y cuando estaba a punto de abrazarla, pasé por su lado chocando un poco su hombro.

Me importó una mierda y seguí.

—Maddox, ¿cómo está?

—Está bien —contesté seco.

—Gracias por traerla —él palmeó mi hombro—. ¿No hablaron sobre lo sucedido?

Si supiera que hicimos todo menos hablar, y no tengo remordimiento alguno.

—No tenemos una buena relación y no confiará para decirme nada. Además, soy tu amigo.

—Tienes razón.

¿Y cuándo no?

—Quiero disculparme, fui un idiota con ella.

—Sí, lo fuiste, y honestamente espero que la próxima vez te parta la cara en lugar de irse, porque te lo mereces —dije y subí las escaleras.

—Oye, ¿nos vamos de cacería?

—Bien.

Subí a cambiarme.

—¿Y por qué? —se quejó Christian con Isobel.

—¿Quieres que te perdone? Entonces integra a Pax.

—Pero...

—Pero nada, cielo, no es discusión.

—Está bien.

Negué con la cabeza.

No me sorprendía que se dejara dominar por su novia.

Némesis #1Donde viven las historias. Descúbrelo ahora