Boobs

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—Satoru~

—Toru~

—Satoru?

El sonido de su nombre saliendo como un gemido de la boca de su mejor amigo fue desapareciendo hasta convertirse en un llamado con duda

—Satoru? Estás bien?

Sentía como una voz lo sacaba de su al parecer maravilloso sueño

—Suguru? Que pasó?

aún no procesaba lo que acababa de soñar hace unos instantes, solo estaba perdido mirando al chico que tenía en frente

—Idiota parecía que te estabas hiperventilando..estás sudando

—Encerio?—el sueño que acaba de tener lo alteró demasiado al parecer

—Debe ser por la pesadilla que tuve...es que ayer estaba jugando un juego de terror

Satoru se paro del sillón tomando el vaso de jugo para llevarlo a la cocina

—Satoru estás seguro que fue una pesadilla?

—Si porqu- —Satoru bajo la mirada y tenía a Suguru a la altura de su entrepierna mirando fijamente

Suguru tenía una mezcla de cara de sorpresa, y trauma

Satoru se puso rojo por su evidente erección que era tan gigante que podía hacerle competencia a la torre Eiffel....y más aun que al pararse del sillón dejaba a su mejor amigo sentado justo a la altura de su entrepierna

—No creía que la tenías tan grande

El albino no sabía qué decir, a veces dormía con su mejor amigo y despertaba con una erección la cual era normal....pero acaba de tener el mejor sueño húmedo de su vida con su mejor amigo y ahora este le está hablando de lo grande que es su pene???

Suguru soltó una pequeña risa

—Me parece un poco enfermo que justo a mi lado y en mi sillón estés teniendo sueños húmedos....definitivamente necesitas tener sexo Toru

El pelinegro volvió a reír

—No te avergüences es normal....pero a la próxima no tengas esos sueños al lado mío

Satoru era completo silencio... Suguru literalmente estaba hablándole casi frente a su pene, como espera que no se avergüence más?

—Ve al baño y baja eso...tengo sueño así que te espero arriba

—Está bien....—el albino acomodaba su cabello tratando de calmar su visible vergüenza

—Pero muévete, o quieres que te ayude?—dijo el pelinegro señalando su boca con su propia mano

Satoru se puso más rojo, si era posible aún

Suguru volvió a reír burlándose de su amigo

—Idiota estoy bromeando, ve al baño y desasté de eso, voy llendo a la cama, si demoras no hagas ruido por favor

El pelinegro se levantó del sillón apagó la tele y subió las escaleras

Ahora como me deshago de esto?

No quiero utilizar mi mano, tengo a la razón de mi erección durmiendo plácidamente en su cama, quisiera despertarlo y acabar en sus tetas o en cualquier parte de su cuerpo