A Strange Twist of Fate ⭑

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Un extraño giro del destino

by shinigami714


https://archiveofourown.org/works/46896040



☆ Etiquetas: Universo alternativo: divergencia canónica - Herencia de criaturas - Menos una herencia y más una casualidad - Ficción sobre criaturas - Mitología - Hada Harry Potter - Lobo Draco Malfoy - Pocionero Draco Malfoy - Las gafas de Harry son parte de él y las mantiene puestas casi todo el tiempo - Añoranza mutua - Marcado de olor - Naturaleza - amigos que te apoyan - Almas gemelas o algo - Sexo al aire libre - Fantasía - AU después del libro 7 De la posguerra.

☆ Capítulos: 1

☆ Palabras: 18,348

☆ Estado: Finalizada. (Final dulce)

☆ Advertencias: Podrás saborear el azúcar leyendo cada párrafo. Te saldrán caries por tanta dulzura. Harry es un hada y puede camuflarse en la naturaleza.


☆ Resumen: "Harry no esperaba despertar un día sin ser del todo humano, pero el universo siempre había disfrutado mucho de arrojarlo a los lobos. Y cuando cierta persona lo descubrió en una situación un tanto... incómoda, se dio cuenta de lo literal que era esa declaración".

Es una historia muy dulce y cortita. Harry con los pies descalzos y entrando en la macetita de tierra para saciar su necesidad de vincularse con la naturaleza, me dejó llorando brillitos.

Y ahora Harry sabe que le pueden brotar flores de cerezo y frambuesa de la piel, gracias a que Draco Malfoy le hizo sonrojar (hacen mermelada, aquí nada se desperdicia). Draco es un tonto romántico que está muy enamorado de un Harry buena suerte Potter, accidentalmente convertido en hada.



☆ Probadita de la historia ¡SPOILER!:


(Son muchos fragmentos, pero me derretí... LÉANLO)



" El rostro de Harry se puso increíblemente rojo y varias flores comenzaron a brotar en lugares aleatorios, los pétalos flotando delicadamente sobre sus hombros. Chilló y rápidamente los aplastó. Nunca había sido de los que hacían alarde de sus sentimientos más íntimos, pero ahora que era un hada, no tenía por qué hacerlo. La magia de las hadas disfrutaba enfermizamente delatarle por sí sola.



¿Draco ya reconocía su olor? ¿Tan rápido y desde tan lejos? ¿Entre tantas otras plantas y hierbas potentes? Seguramente no.

Neville entró en pánico, revolviendo torpemente los ingredientes que estaba reuniendo en una caja. Varios frascos chocaron entre sí mientras se apresuraba a ponerlos en posición vertical con dedos temblorosos. —Eh... él... él se fue, Malfoy —tartamudeó Neville—. ¿Cómo supiste que trabajaba aquí?

—No lo hice —dijo Draco arrastrando las palabras. Seguía mirando con curiosidad el follaje, sospechosamente cerca de donde Harry se escondía contra el árbol.

—¡Oh! Bueno... yo... —Neville se quedó en silencio, luciendo aún más nervioso que antes, y Harry casi se rió. Sintió una oleada de calidez por Neville en su pecho. Realmente era un muy buen amigo. Y muy probablemente pensó que había delatado a Harry.

Draco respiró de nuevo y cerró los ojos mientras aspiraba los olores abrumadores que había en la tienda, antes de abrirlos y dar un paso hacia el borde del mostrador. —Ahórrate la molestia, Longbottom. Puedo olerlo. Está justo ahí —dijo Draco asintiendo con la cabeza.



A ellos les gustaba jugar un pequeño juego de vez en cuando, cuando Draco visitaba a Harry mientras estaba perdido entre los helechos crecidos dentro de la tienda de Neville. En lugar de mostrarse de inmediato, hacía que Draco trabajara para conseguirlo. Le hacía olfatearle entre las muchas plantas que crecían dentro de Hierbas y Calabazas.



Siempre sabía si Harry estaba allí. Olfateaba el aire y le hacía señas para que saliera murmurando " Potter, muéstrate " con su característico acento. Luego bromeaban durante un rato y Harry intentaba, sin éxito, no hacer que le brotara alguna variedad de vegetación en masa de su cuerpo cada vez que Draco hacía que su corazón latiera un poco más rápido de lo normal con una de sus características sonrisas burlonas.



Harry entendió que el acónito impedía que Draco se convirtiera en un asesino demente, pero no pudo evitar preguntarse cuánto de Draco aún sería superado por el cambio.


—¿Prometes no comerme? —jadeó Harry, y Draco mordisqueó sus labios de manera burlona, ​​​​clavando sus garras en la tierna piel de sus muñecas.


—Supongo que depende de lo sabroso que te veas —siseó Draco.



Sus orejas puntiagudas se redondearon y la textura similar a la corteza se desvaneció a su tono habitual. Los restos de follaje se movieron y se encogieron, hasta que los únicos restos de naturaleza sobre su cuerpo fueron las hojas sueltas que aún se aferraban a sus oscuros mechones de cabello y los destellos de color algo encantadores en sus ojos. "



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