Capitulo 11

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-Xiang Yi Mo (Xiàng vĩ mô) Xiang Yi Mo, la protagonista femenina

一景(jing qiān)- Jing Qian, un talentoso cirujano del departamento de Cirugía Cardiotorácica

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Jing Qian salió del hospital y llegó a la residencia de Xiang Yi Mo

Detuvo el vehículo frente a la entrada de la villa. De repente, recordó la llave que había olvidado devolver y la utilizó para abrir la puerta

Luego, regresó a la puerta del asiento del pasajero delantero y sacó con cuidado a Xiang Yi Mo, que estaba inconsciente, del auto. Paso a paso, caminó hacia la villa con mucho paso firme.

Esta serie de movimientos fueron suaves y fluidos. Jing Qian se dirigió al dormitorio de Xiang Yi Mo de la forma habitual.

Xiang Yi Mo fue colocada suavemente en la suave cama. Jing Qian se sentó en el borde de la suave coma y la miró sin pestañear.

La fragancia de su cuerpo seguía entrando en sus fosas nasales. Era como si contuviera dulzura con un toque coqueto, como sus labios rojos besándolo, rozando cada centímetro de su piel y filtrándose a través de ella, estimulando su sangre hasta hervir.

O ese olor permanecía en la punta de su nariz, invadiendo su fosa nasal poco a poco, traqueteando y tensando cada nervio que mantenia su cordura junto con los músculos de su cuerpo.

Ella era seductora hasta la médula

Cuanto más tiempo se quedaba, más sensación tenía Jing Qian de que la fragancia impregnaba todo el espacio donde estaban solos.

Sumergido en la fragancia, el deseo brotó y creció silenciosamente.

Sus dedos largos y delgados tocaron el rostro de la mujer, deslizándose hacia su hermosa mandíbula y enroscándose entre su espeso cabello negro azabache.

Le revolvió un lado del largo cabello negro. Con las yemas de los dedos levantó algunos mechones y los besó.

Después de eso, lo olió. Como era de esperar, incluso su cabello olía bien.

Su nuez de Adán se movió mientras Jing Qian bajó gradualmente su cuerpo.

Él no quería simplemente darle un beso en el cabello.

Quería besarle las cejas, los párpados, la punta de la nariz, las mejillas

Sus besos, poco a poco, cayeron de arriba a abajo.

Finalmente, no pudo contenerse y no quiso contenerse. Colocó suavemente sus labios sobre los delicados labios rojos de la mujer.

Incluso su respiración era inconscientemente más suave.

Sus labios eran tan suaves que no pudo resistirse a ponerlos en su boca

Esto hizo que Jing Qian, que inicialmente tenia la intención de darle un beso, no diera señales de detenerse. En cambio, se frotó los labios de un lado a otro dos veces.

Su deseo broto como un árbol frutal

En la punto de su nariz, el aroma se intensificó y, mientras la besaba, invadió sus labios y dientes.

Era tan dulce que él quería tragársela.

Pero...

La pequeña boca que él besó dejó escapar una voz apagada, y los párpados cerrados se tensaron mientras sus pestañas se movían suavemente.

Parecía que estaba a punto de despertar.

Al observar la reacción de la hermosa chica que estaba debajo de él, Jing Qian respiró profundamente y exhaló lentamente. Se contuvo, soltó sus labios con gran renuencia y se puso de pie.

Al mismo tiempo, Xiang Yi Mo, que yacía en silencio en la cama con los ojos cerrados, abrió los ojos como si la hubiera besado un príncipe.

Sus borrosos ojos en blanco y negro parpadearon porque se había despertado. Estaba un poco aturdida.

No fue hasta que vio claramente el rostro claro y elegante de Jing Qian.

Sus ojos color flor de durazno giraban y se movían alrededor de su entorno como para confirmar dónde estaba.

Ella ciertamente sabía que era Jing Qian quien la había enviado de regreso.

-Gracias por traerme de vuelta. Si no hay nada más, Jing Qian, puedes irte ahora. Además, estoy bien. No estoy enferma. Así que no necesitas quedarte aquí y cuidarme.

Los ojos de Jing Qian se fijaron en ella y dijo: "Mo Mo, tengo una enfermedad".

Xiang Yi Mo miró al hombre con sorpresa.

Ella lo escuchó continuar diciendo: "Mo Mo, sufro de insomnio severo y he probado de todo durante varios años. Solo podía tomar pastillas para apenas conciliar el sueño. Pero me quedé atónita cuando logré dormir a tu lado dos veces.

-Tal vez.. No, Mo Mo, tú eres el único que puede curar mi insomnio. ¿Puedes dejarme quedarme a tu lado?

La voz clara y magnética era muy suave. ¿Dónde estaba su figura fría y distante habitual? En cambio, era como una brisa primaveral que la acariciaba suavemente con una calidez indescriptible, haciéndola bajar gradualmente la guardia y no poder rechazarlo.

Jing Qian pudo ver que la mujer vaciló un poco y se aprovecho de la situación.

"Mo Mo, no te haré cosas extrañas".

"Ayúdame, ¿de acuerdo?"

Xiang Yi Mo fingió angustia y parecía que lo había pensado durante mucho tiempo, sopesando los pros y los contras antes de aceptar.

-Jing Qian, puedes quedarte aquí e incluso dormir a mi lado. Pero, en términos relativos, quiero que no digas ni una palabra. Sabes a qué me refiero. También entiendo que hay cosas que no puedo ocultarte, aunque me esfuerce por negarlas.

"Eres inteligente y no quiero que mi familia se entere ni un segundo. No estoy enfermo. ¿Puedes aceptarlo?"

En ese momento, la delicada y suave voz era incomparablemente sobria y seria.

Jing Qian la miró en silencio durante dos segundos.

Dijo con esa voz agradable, clara y magnética: "Está bien".

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Después de dormir con los mejores amigos de mi amiga de la infanciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora