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La princesa Lucía saltó por la ventana y aterrizó suavemente en el jardín del palacio. Se detuvo un momento para disfrutar del fresco aire nocturno y luego se dirigió hacia el bosque que rodeaba el palacio.

Mientras caminaba, pensó en los príncipes que llegarían al día siguiente. Sabía que su padre, el emperador, esperaba que ella eligiera a uno de ellos para casarse, pero Lucía no estaba segura de querer casarse con ninguno.

De repente, escuchó un ruido detrás de ella. Se dio la vuelta y vio a Dan, el guardia, siguiéndola.

"Dan, ¿qué haces aquí?", preguntó Lucía.

"Te seguí para asegurarme de que estés segura", respondió Dan.

Lucía sonrió. "No necesito que me protejas, Dan. Puedo cuidarme sola".

Dan se encogió de hombros. "Lo sé, pero es mi deber como guardia real".

Lucía asintió y continuaron caminando juntos en silencio.

Al día siguiente, los tres príncipes restantes llegaron al palacio. Lucía los recibió en el salón del trono, junto a su padre y los demás nobles.

El primer príncipe se presentó como el príncipe Henry de la casa de Windsor. Era un hombre alto y apuesto, con ojos azules y cabello rubio.

El segundo príncipe era el príncipe Liam de la casa de Lancaster. Era un hombre moreno y musculoso, con ojos verdes y cabello negro.

El tercer príncipe era el príncipe Ryker de la casa de York. Era un hombre alto y delgado, con ojos marrones oscuros y cabello castaño claro con reflejos dorados. Tenía una cicatriz en su mejilla izquierda y una sonrisa enigmática.

Lucía los miró a todos y se sintió abrumada. ¿Cómo iba a elegir a uno de ellos para casarse?..

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⏰ Última actualización: Jul 30, 2024 ⏰

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Cor FerrumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora