Capítulo Ocho.

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—¿Qué hacías allí?— Akaza golpea el rostro contrario, destrozando gran parte de la cabeza.
—Te dije que no fueras trás ese humano.

—¿En qué problema se metieron?— Nakime los mira fijamente. Esos dos aparecieron de la nada.

—Doma, Akaza.

Ante aquella voz siniestra, los tres demonios agachan la cabeza. 

—¡Mi señor! ¡He cometido un error! ¿Quizás deba quitarme un ojo y dárselo? ¿O prefiere mi cabeza completa?— Doma se arrodilla y dice aquello en tono alegre.

—No tengo interés en ello.— Muzan aparece delante y mira a Akaza. Sonríe sin emoción y lo señala.
—Tú me ayudarás.

—Si, mi señor.— el pelirosa mantiene los ojos abiertos con sorpresa.

—Tú, Doma, permanecerás aquí hasta que decida lo contrario.— se retira, dejando a los tres demonios en estado confuso.

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Toco mi cuello y suspiro con pesar, el collar dejó una marca debido a su agarre.

—Mamá.— miro a través del espejo y veo a Genya.
—¿A dónde vas?

Es la hora de ir a ese establecimiento, pero por esta noche no iré. Tampoco me encontraré con ese demonio, fue difícil limpiarme y quitarme su aroma.

—Niños, quiero hablar con ustedes.— empujo a Genya por los hombros y lo guío hasta la habitación, dónde están los demás. Nezuko se acerca corriendo y pide que la levante. Lo hago y voy hacia mi cama.

—¿Qué sucede?— Tanjiro me mira preocupación. Zenitsu también se me acerca y se sienta mientras agarra mi mano. Inosuke se queda cerca de la ventana y Genya se coloca al lado de Tanjiro.

—Estoy tratando de conseguir un Alfa, más específico, su mordida. Con una marca en mi cuello me darán empleo e impedirá que otros Alfas se acerquen.— mientras hablo, Inosuke se acerca.

—¿Por qué necesitas eso?— Zenitsu me mira con grandes ojos.

—Los Omegas mayores no pueden andar con total libertad, el celo les asusta a muchos.— Genya suspira y explica con calma.
—Si mamá consigue un Alfa, entonces podrá moverse sin preocuparse por irregularidades en su celo. Sin embargo, eso de sólo querer la mordida no me parece nada lindo.

—Yo también pienso eso.— Tanjiro baja la cabeza.
—Estaría bien si fuese porque quieres, pero crear un lazo con un desconocido...

—Tanjiro tiene razón, mamá, no puedes dejarte marcar por alguien que no conoces. ¿Y si al Alfa no le gustamos?

Tú Eres Mi Única Opción... (MuzanxGiyuu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora