Vestidores

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Estigmatofilia

Este tipo de personas sienten verdadera atraccion por las perforaciones, los tatuajes o las cicatrices corporales. De ahí que necesiten contemplar, rozar o tocar una piel tatuada

Jisung era un chico bastante normal que vivía su vida como un típico adolescente de universidad cliché, el típico niño bueno que tenía las mejores calificaciones, y era novio del "chico malo" que todo el campus deseaba, odiado por muchos, pero amado por muchos mas.

Cada viernes el pequeño Jisung se quedaba en el gimnasio para poder mirar a su chico entrenar, ademas de que el cuidaba las pertenencias (celular, dinero, etc) cuando jugaba o entrenaba

Realmente Minho pasaba una hora y media concentrándose en su deporte y a Jisung no le aburría o disgustaba en absoluto el podía pasar horas y horas mirando a su novio sin problema alguno.

Aunque igualmente tenía que esperar a que éste antes de salir de la Universidad terminara de ducharse y de cambiarse aquel uniforme de Americano.

–¡Amor!– Minho llamo desde las duchas del gimnasio a su pequeño novio que no estaba muy lejos.

Claro apenas Jisung escucho a su pareja se acercó mas a aquel lugar –Dime, honnie– hablo alto con aquel apodo meloso para que Minho lograra oírle.

–Deje la mochila en las gradas ¿puedes pasármela?– El coreano gritaba con el eco que producía el vestidor.

Jisung no dudo en mirar las gradas y una vez divisó la mochila de su enamorado no dudó en ir por ella –Acá está Honnie– le grito ya nuevamente desde la entrada de los vestidores.

–Entra, no hay nadie mas y ni siquiera puedo acercarme a la salida porque mi toalla esta ahí– claramente se refería a la mochila que ahora tenía Minho.

A Jisung una vez su novio le cercioro de que ya nadie estaba ahí sin importarle mucho entró a aquel lugar caluroso donde abundaba el vapor debido a las regaderas.

–Aquí está Honnie– el chico más bajito extendió la pequeña maleta entre todo el vestidor, es decir no sabía en cual se hallaba su amado.

–¡GRACIAS JISUNGGIE!– Minho grito para que el chico supiera donde estaba y pudiera llevarle la mochila.

Jisung una vez escucho donde estaba su pareja caminó a aquella regadera algo nervioso ya, ahora que lo pensaba mas seriamente, tendría que ver a su novio desnudo...por primera vez completamente desnudo.

Apenas con esos pensamientos Jisung ya tenía las mejillas sumamente rojas y tibias mientras seguía su camino en dirección a la regadera donde estaba Minho.

–Toma Honnie– el joven moreno cerro por inercia sus ojos cuando extendió aquella mochila provocandole una risa a Minho.

–¿Que ocurre?– El más alto arqueo una de sus cejas –¿No quieres verme?~– esto lo dijo en un tono mas provocativo de lo usual.

Jisung ya demasiado tentado por la sensación de curiosidad y deseo de ver a su novio lentamente comenzo a abrir los ojos.

Claramente no tardo en deleitarse con el bien formado cuerpo de su novio sus brazos y abdomen bien trabajados, que realmente denotaban el deporte que hacía.

Aunque todo aquello fue opacado apenas bajo un poco la vista, más que fijarse en la hombría de su chico (como éste pensaba) se centro en aquel tatuaje que adornaba su pelvis. De hecho, estaba un poco mas abajo de su pelvis el bonito dibujo del colibrí casi rozando su muslo
El moreno se quedo unos minutos mirando aquel tatuaje como si fuera lo mas normal del mundo aunque a Minho poco le incomodaba aquello.

–No me dijiste que tenias un tatuaje– Jisung susurró aquello como si tuviera miedo de ser escuchado por alguien más aunque ya nadie estaba ahí.

Minho estaba algo confundido por aquella situación, no le desagradaba para nada la mirada fija de su novio ahí, sólo le causaba curiosidad.

–No pensé que fuera importan-...– El mas blanco corto su oracion apenas noto a su novio comenzar a acercarse más a él.

–Es muy bonito...– Jisung volvió a susurrar en un tono bajito mientras sin pensarlo mucho se ponía de cuclillas frente su novio.

–Jisung...– Minho lo llamo, éste comenzaba a ponerse nervioso por la repentina y muy nueva actitud de su novio, al menos para el era nueva –¿Qué planeas?–

–¿No querías que te viera?– respondió en un tono de picardía mientras sus manos comenzaban a delicadamente tomar la cadera de Minho con delicadas caricias tenues en su piel.

El más chino solo miraba tragando saliva, realmente la imagen de tener a Jisung en cuclillas frente su anatomía desnuda le causaba escalofríos, que se hacían mas intensos con las caricias que el mas pequeño repartía en su cadera y cintura.

–Me encanta verte, Me encanta tu tatuaje~– Jisung emitió una voz mas jadeante de lo usual, mientras cerraba sus ojos delicadamente para comenzar a besar aquel bonito colibrí tatuado en la piel de su amado.

Dichas acciones le provocaron un intenso escalofrío a Minho el cual le recorrió toda la espina dorsal. Jisung comenzaba a dejarse llevar por el placer que le causaba el acariciar y besar el tatuaje de su amado.

Una vez aquel dibujo del pequeño colibri estuvo completamente húmedo debido a la saliva del chiquillo, éste se separo unos escasos centímetros.

Miro a Minho con una sonrisa de sumisión ante todo lo que acaba de hacer.

Y con esa mirada, para el chico de piel mas blanca fue la escena mas jodida mente lasciva. El tacto de Jisung no dudo en rodear la hombría ya semi erecta de su novio para comenzar las masturbaciones rítmicas ganándose unos gemidos roncos por parte de su novio.

–Eres un niño malo...– Minho logró decir entre sus jadeos que cada vez eran más audibles y desorbitados.

–Lo soy – Jisung respondió sin mucho rodeo mientras dejaba de masturbar el falo de su novio, ganándose un quejido en modo de disgusto  –Soy tu niño malo-

Tomó con firmeza la base de la hombría de su novio para comenzar a introducir la misma a su boca de manera gradual, a su vez teniendo como respuesta los roncos gemidos de Minho.

Por inercia al querer sentir más, el coreano comenzó a mover la cadera buscando que su logitud llegara hasta lo mas profundo de la garganta del pequeño Jisung.

VESTIDORES | MINSUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora