I'm still standing

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Después de una noche emocionante en la pista de patinaje, Checo y Max se despidieron con una sonrisa. "Gracias por confiar en mí, Checo", le dijo Max. "Prometo que tu secreto está a salvo". Checo asintió con la cabeza, sintiendo un peso menos en sus hombros.

A la mañana siguiente, Fernando Alonso se acercó a Checo en el paddock. "Checo, necesito hablar contigo", le dijo con una mirada seria. Checo se preparó para lo peor, pensando que su padre había descubierto su secreto.

"Pero, papá, ¿qué pasa?", le preguntó, tratando de mantener la calma. Fernando lo miró fijamente y dijo: "He decidido que es hora de que te concentres exclusivamente en la Fórmula Uno. No quiero que te distraigas con nada más". Checo sintió un golpe en el estómago, sabiendo que su padre nunca aceptaría su pasión por el patinaje.

"Pero, papá...", intentó protestar. Sin embargo, Fernando lo interrumpió. "No hay pero que valga, Checo. La Fórmula Uno es tu futuro, y debes comprometerte al 100%". Checo se sintió atrapado, sabiendo que no podía revelar su secreto, pero tampoco podía renunciar a su pasión por el patinaje...

Checo se sintió frustrado y desanimado después de la conversación con su padre. Sentía que estaba atrapado entre su pasión por el patinaje y la presión de su padre para concentrarse en la Fórmula Uno.

Mientras estaba sentado en su habitación, reflexionando sobre su situación, recibió un mensaje de texto de Max. "Hey, Checo, ¿cómo estás? ¿Qué pasó con tu padre?".

Checo suspiró y comenzó a escribir una respuesta. "Estoy bien, Max. Mi padre quiere que me concentre solo en la Fórmula Uno. No sabe sobre el patinaje y no creo que lo acepte".

Max respondió rápidamente. "No te rindas, Checo. Tu pasión por el patinaje es algo especial. Encontraremos una manera de hacer que funcione".

Checo sonrió ligeramente, sintiendo un poco de esperanza. Tal vez, con la ayuda de Max, podría encontrar una manera de seguir su pasión por el patinaje sin decepcionar a su padre.

De repente, una idea se le ocurrió a Checo. "Max, tengo una idea. ¿Y si organizamos una exhibición de patinaje en secreto? Podríamos invitar a algunos amigos y familiares, y demostrarle a mi padre que el patinaje es algo serio para mí".

Max respondió con entusiasmo. "¡Eso es genial! Estoy contigo, Checo. Vamos a hacer que suceda". Y así, los dos amigos comenzaron a planificar una exhibición de patinaje en secreto, sin saber que esto cambiaría todo...

La emoción de planificar la exhibición de patinaje en secreto mantuvo a Checo y Max ocupados durante las siguientes semanas. Encontraron una pista de patinaje disponible en un lugar discreto, diseñaron un programa emocionante y empezaron a invitar a amigos y familiares de confianza.

Mientras tanto, Checo continuó compitiendo en la Fórmula Uno, pero su mente estaba en el patinaje. Se sentía dividido entre su deber hacia su padre y su pasión por el patinaje.

Finalmente, el día de la exhibición llegó. Checo se puso su traje de patinaje y se dirigió a la pista, nervioso pero emocionado. Max lo esperaba allí, sonriendo.

La exhibición comenzó y Checo se dejó llevar por la música y el movimiento. Patinó con todo su corazón, mostrando a los presentes su habilidad y pasión.

Entre el público, Fernando Alonso observaba con una mezcla de sorpresa y orgullo. No sabía qué pensar, pero no podía negar la habilidad de su hijo en el hielo.

Al final de la exhibición, Checo se detuvo en el centro de la pista, exhausto pero feliz. Max se acercó a él y lo abrazó. "Lo lograste, Checo. Eso fue increíble".

Fernando se acercó a ellos, con una expresión seria. "Checo, necesito hablar contigo", dijo. Checo se preparó para lo peor, pero su padre lo sorprendió. "Estoy orgulloso de ti, hijo. No sabía que el patinaje significaba tanto para ti. Tal vez deba reconsiderar mi postura...".

𝚜𝚎𝚛𝚐𝚒𝚘'𝚜 𝚜𝚎𝚌𝚛𝚎𝚝 𝚌𝚑𝚎𝚜𝚝𝚊𝚙𝚙𝚎𝚗Donde viven las historias. Descúbrelo ahora