Querido Fan | LeeJoo

Capítulo 5

Narrador

Fin de semana, el momento más anhelado de Taekjoo, por fin podría descansar de su pesado jefe y los trabajos mal hechos.

El chico se encontraba en su sala mientras revisaba las noticias del día, no había nada nuevo que hacer, amaba la idea de quedarse todo el día en su hogar.

Con un bostezo cerró su computador, en ocasiones, también le era aburrido el internet.

Se levantó del sofá y observó desde su balcón a toda la cuidad, se preguntaba en dónde estaría esa persona que lo amara con la misma intensidad de los libros de romance, porque sí, en Taekjoo vivía una pequeña ilusión de amor, algo diferente a lo que había a su alrededor, solo pudo preguntarse quién sería la persona que lo amaría como siempre había deseado.

A esa misma hora, Lee Won estaba en su balcón también, se encontraba admirando la pequeña planta que tenía allí, era una dalia blanca y otra de color violeta, llevaba una hora allí, la siguiente semana tendría ese evento de firmas y tenía la esperanza de encontrar a esa persona entre los cientos de fans.

Aún recordaba como se había enterado, los exámenes físicos revelaban su extraña condición, algo que muchos le llamaban una "maldición" pero para su madre, fue más como una bendición.

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-No es ninguno y es todos a la vez -explicó el doctor, el pequeño Lee Won ladeó la cabeza sin entender nada.

-¿Qué dice? ¿Está seguro que los exámenes se hicieron correctamente? -la madre del pequeño miró los papeles sobre la mesa.

-Totalmente seguro señora, déjeme explicarle -se aclaró la voz-. Su hijo nació siendo algo que se conoce como: "Género neutro" algo así no es tan común, solo el 2% de la población mundial nace así -miró al pequeño y le sonrió-. Como no es tan común, no se sabe mucho sobre eso así que lo tienden a catalogar como una enfermedad -del frasco de cristal en la mesa, el hombre de gafas con un grueso cristal, tomó una paleta y se la extendió al niño-. Algunos también lo catalogan como una maldición.

-¿A qué se refiere con eso? -el niño miró a su madre buscando la aprobación para tomar la paleta-. ¿Mi hijo está bien o no? -la mujer tomó la paleta de la mano del doctor y se la dió a Lee Won, este le quitó la envoltura y comenzó a lamerla sin preocupación alguna.

-Sí, por supuesto, su hijo es un niño totalmente sano -el doctor asintió-. No hay ningún problema con él, solo que él es alguien muy especial, por eso tiene una pequeña parte de los tres géneros -le sonrió-. Cuando el niño crezca, no podrá sentir las feromonas de las demás personas, independientemente si son alfas u omegas, no las sentirá, como un beta normal -hizo una pausa-. Producirá feromonas que serán atractivas para alfas y omegas, podrá quedar en cinta como los omegas, y también podrá hacer que un omega quede embarazado, como si fuera un alfa -la madre lo miró, anonadada.

-¿Qué...? ¿Y cómo se supone que use las feromonas si no puede sentir las de otra persona? -preguntó intrigada.

-Y ahora viene la parte por la que muchos llaman maldición a la condición de su hijo -con toda calma el doctor comenzó a explicar-. De la única persona de la podrá sentir sus feromonas será de su "destinado" una persona que nació específicamente para él, pero hay algo -la mujer acarició el cabello de su hijo, intentando calmarse a sí misma-. Esa persona puede estar en cualquier parte del mundo, puede ser un alfa, beta u omega, niño, adulto o alguien de tercera edad, por eso muchas de la personas con esa condición mueren sin haber conocido a su destinado, porque es difícil saber quién es.