¿Por qué? - Completa

Lejos

Zeus contemplaba a cada uno de los dioses frente a él. Había pasado mucho tiempo pensando en cómo cambiar todo a su favor.

Sin Hades, era fácil cumplir la condena de su hermano mayor a su manera. Ni siquiera Odin podría intervenir. Como representante de los dioses, era la mayor autoridad y todos cumplirían su sentencia.

El verdadero problema era aquellos humanos. Inclusive aquellas valkirias que los desafiaron.

-Poseidón, dios de los mares. Loki, dios del engaño y las mentiras, ambos fueron sentenciados hace un tiempo. Debido a su fuga, no pudieron cumplir con su condena - dijo repitiendo la misma introducción vacía y repetida de cada juicio.

Su hermano permanecía en silencio. Vió como su mirada, casi impasible, guardaba una confianza inesperada.

-"Oh... Poseidón.... Qué escondes de nosotros"- pensó internamente Zeus.

Levantó su mano, con su dedo índice apuntó hacia el cielo.

-El castigo ha sido decidido - los presentes miraron fijamente a Zeus - Poseidón permanecerás lejos de todos. Tanto de dioses como humanos. Serás encerrado en el Tártaro junto al resto de los titanes que lucharon contra nosotros. No daré una fecha exacta para tu libertad. Dejaré eso en manos de nuestro hermano mayor - expresó con picardía.

El tirano de los mares agudizó la mirada, apretó sus dientes y manos con fuerza.

-"¡Quién era Zeus para incluir a Hades en esto!"- pensó con enojo. Estaba en desventaja si el dios del Inframundo lo encarcelaba perpetuamente.
No tendría oportunidad de ver a Sasaki... Su plan fallaría de nuevo -"¡Desgraciado!"- insultó al saberse acorralado y al reconocer el placer de Zeus por el efecto de sus palabras.

Zeus empezó a sonreír ante el cambio en su hermano. Ahora sabía que Poseidón no era invencible. Después del Ragnarok, su hermano había sido vencido por un simple humano. Ya no tenía por qué temerle. Por ahora, dejaría todo en manos de Hades.

-En cuánto a ti, Loki, debido a tu ayuda para encontrar a los desaparecidos me temo que tu pena ha sido levemente "reducida" - Loki miró con cierta alegría. Una patética esperanza había crecido en su mente - aunque no creo que sea algo fácil para tí. Después de todo, volverás al lugar donde naciste.

Toda esperanza del dios del engaño se había esfumado.

-Zeus.... No me digas... No eso no.. es posible - trató de objetar. Buscó la mirada de su hermano y su padre.

Ninguno demostró empatía.

Ni guno estaba de su lado otra vez.

-Loki, regresarás donde una vez los gigantes de hielo reinaron. Pero no te preocupes.... a diferencia de mi hermano, vivirás ahí hasta la próxima vez que todos los dioses debamos reunirnos. Hasta la próxima vez que determinemos el destino de la humanidad.

Todos sabían a qué se refería.

Loki no dijo nada. Su destino miserable había llegado nuevamente a él. Otra vez, era exiliado. Era un extranjero entre todos los demás.

-Dios Zeus...- llamó para su sorpresa su hermano Thor - solicito permiso para ver a mi hermano hasta que se haya cumplido su sentencia.

Eso era inesperado.

-Thor... Si eso es lo que deseas. No me opondré - dijo finalmente el padre de los dioses griegos - Ahora que ya hemos decidido,  cada uno de los dioses presentes acompañarán a los condenados a su destino.

Luego de decir esto, Zeus procedió a marcharse. Poco segundos después, Odin había imitado su acción.

-Ya es hora de irnos, Loki - expresó Thor cerca de su hermano. Había tomado las esposas para llevarlo hacia su destino.

-Gracias, Thor - agradeció el dios del engaño - no esperaba que...

-Eres mí hermano... Después de todo - contesto el dios del trueno haciendo que Loki involuntariamente, sonriera.

Por otro lado, Hércules, Hermes y Belzebuub tomaron al tirano de los mares evitando cualquier descuido.
Era notorio el enfado de Poseidón ante lo dicho.

Sin esperar más, llevaron al griego a las afueras del Olimpo.

El Tártaro los esperaba.

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Mientras tanto,
en la Mansión del Edén.

-Hades... - escuchó el inmortal con sorpresa.

Había deseado escuchar esa voz tantas veces...

Había ansiado verlo otra vez.

Hades dió la vuelta en dirección de la voz.

El hombre que había conquistado su corazón estaba a pocos metros acompañado de su valkiria.

Rápidamente, pudo ver las vendas en su cuerpo. Portaba una katana en sus manos mientras que con la otra se sostenía de la guerrera a su lado.

-¡Sasaki! - dijo comenzando a acercarse pero siendo detenido por la valkiria.

-No debería estar aquí. Apenas ha despertado, estuvo a punto de morir - expresó la mujer con una mezcla de enfado y preocupación.

Por su parte, Sasaki no sabía cómo reaccionar. Esperaba tanto verlo. Hades, al fin, estaba despierto y consciente. Pero, ¿cómo podría hablar...?¿ Cómo podría verlo después de todo lo que había pasado?

Sasaki sentía la culpa. Sentía la lejanía comenzar a extenderse entre ambos.

-"Yo fui la causa de todo"- pensó mientras veía como el dios batallaba por mantenerse de pie y acercarse. Debía hacer algo, cualquier cosa era suficiente.

-No vengas, Hades -san - expresó sorprendiendo al griego.

-Sasaki... Yo... Soy el responsable. Fue mí decisión. No...- empezó a decir pero el samurái evitaba su mirada.

-Ya no seamos ingenuos, Hades -san. Esto no debe seguir así...para ninguno.... - un breve silencio. El humano miró hacia su compañera de batalla - Hrist, por favor llévalo a su habitación - expresó finalmente el einherjar.

-Sasaki, yo empecé esto. Yo no pude controlarme y.... Mí hermano lo descubrió - agregó el dios sintiendo como cada palabra del mortal lo dejaba cada vez más vacío - si yo te hubiera protegido... No soy tan fuerte

-Hades -san. Esa es la razón por la que debemos hacer esto - dijo Sasaki Kojiro con un leve temblor en su voz. Sus emociones estaban empezando a molestar - ninguno de los dos fue lo suficientemente fuerte por ambos.

El inmortal vió al humano comenzar a retroceder.

-Sasaki...

-Respeta mí decisión, Hades-san... - dijo el mortal alejándose.

Ya no debía hacer nada más.

Todo lo que hiciera después por Hades, solo era innecesario.
Cuánto más pronto renunciara, más rápido podría salir de todo. Esa había sido su decisión antes de verlo.

-¿Estás seguro, Sasaki? - preguntó la Valkiria con miedo.

-Tranquila, Hrist. Es lo mejor. Una vez que todo esté en calma, regresaré al mundo mortal.

-¿Pero... Por qué? ¿Qué hay de Hades? Después de todo lo que pasaron

-Precisamente por ello. Un humano y un dios, no terminan bien. Ambos hemos sufrido innecesariamente. No quiero seguir aquí, Hrist. Para mí, lo que hizo Poseidón solo puede limpiarse con la muerte. Déjame hacer esto para limpiar mí honor - dijo el samurái sin mirar a la Valkiria.

-Iré con los demás. Seguramente, Qin estará esperándome - dijo el einherjar tratando de apaciguar su mente.

Lejos de todo.

Lejos de él.