Hola mi nombre es Nairda, soy un chico normal de tan solo 24 años, mi trabajo es interesante, simplemente es convencer a la gente para que compre algo que no necesita, tengo una facilidad de hablar con la gente. Bueno mientras estaba en mi descanso mi panza gruño, era normal no había desayunado estoy desde temprano ya es como medio día y no he probado ningún alimento. Así que voy a pedir permiso a mi supervisor para irme a comprar algo.
- ¡Jefe me da permiso de ir a comprar algo de comer!
- ¡Sabes que no está permitido! -con voz delicada, pero enojado
- Siento que me desmayó jefe -baje la cabeza y puse una cara tranquilo- ¡Pero entiendo, tiene razón debo de seguir vendiendo, es más importante ser el mejor vendedor de este mes por 7° vez aunque esté apunto de desmayarme!
- Mi jefe me vio de reojo- tienes 10 minutos, ¡No tardes!
¡Ven, tan solo es empatía y lástima! Si lo sé no es la mejor manera, pero que diablos, ¡Soy el mejor vendedor y además realmente si tengo hambre, así que fui al supermercado mientras iba caminando me iba preguntando qué desayunaré.
- ¿Qué voy a comprar para desayunar? Supongo que desayunare un café con pan, es la mejor idea -al igual que estaba en duda si compraba mejor una crepa de la plaza- ¡Mejor me compro un frappé capuchino y una crepa! Eso sí sería un excelente desayuno.
Mientras iba caminando dirigiéndome al local, alcancé a escuchar un pequeño grito de una chica diciendo.
-¡Cuidado!-
¡Demonios! ¿A quién se le ocurre corre dentro de un supermercado cuando están viendo que el piso está recién trapeado y encerado?
Las probabilidades de que chocaras, te derraparas y mucho peor que chocaras con otra persona, eran altas. Los dos caímos al suelo ella quedó frente a mí con la cabeza agachada y yo me caí de espalda, mientras me sobaba la espalda por el golpe iba levantando la mirada ¡Auch eso dolió mucho! -susurre- ¿Oye te encuentras bien? no deberías de correr de esa forma dentro de la plaza y menos cuando acaban de hacer limpieza.
- ¡Disculpa, es que tengo prisa me vine siguiendo!
Mientras me estaba explicando estaba levantando la mirada y al verla, sentí como si me estuvieran bombardeando el corazón, tan solo sus ojos eran de un color azul cielo era más brillantes que el que el mismo mar.
¡Dios, tenía unos labios preciosos bien definidos ni muy grandes ni muy chicos una medida perfecta y dos protuberancias en su cabeza con forma de antenas! ¡Toda una diosa! -Ceñí- … ¿Hee… antenas? ¿Pero qué demonios por qué tiene antenas en la cabeza?
- ¿Disculpa…. Te encuentras bien? -le extendí el brazo mientras tenía la mirada fija en esas dos pequeñas antenas de un color blanco un poco extrañas, no sé por qué me recordaron a los ojos de un caracol tenía la mirada perdida, era tan obvio donde estaba mirando que la chica al darse cuenta de mi mirada se las tapó con ambas manos y salió corriendo. Mientras me iba levantando escuché detrás de mí, una voces de unos hombre diciendo: - ¿Por dónde se fue? si la perdemos de vista el jefe nos matará a los dos.
- ¿A mí? -ciño- Si tú tenías la indicación de cuidar ¿En qué momento quitaste la vista de ella? Lo único que nos habían encargado y tú literalmente lo arruinaste.
- ¿Yo? -ciño- pero si tú fuiste el que quería los helados.
- ¡Olvídalo! Busquemos a la chica tú ve para allá -señalando la dirección - y yo voy por acá.
- ¡Okey!
Seguía sin entender lo que pasaba lo único que sé es que esas dos personas por algún motivo me recordaron al mismo tiempo esa película qué llegue ave cuando era más pequeño en la casa de mis padres, como sea, ahora me puse a buscar a la chica para ver a dónde iba corriendo. Por suerte la pude alcanzar, cuando doblo en una esquina escondiéndose en uno de los pasillos. Y ya estaba escondido en cuclillas tapándose o tratando de tapar lo que al parecer eran sus antenas con el con los mechones de cabello.
- ¡Disculpa! ¿Te encuentras bien? -me acerque a ella-
- ¡Haa… este… bueno… ¿Las vistes verdad? No trates de ocultarlo ¿las vistes, verdad?
- Si te refieres al par de antenas que están saliendo en este momento de tu cabello posiblemente sí las veo y la sigo viendo.
- Entonces solamente puedo pedirte ayuda a ti -su cara estaba preocupada- necesito que guardes mis secretos no le digas a nadie más y necesito que me ayudes a salir de aquí. Hay unos hombres que me están siguiendo y si me llevarán de nuevo a ese lugar.
- ¿A ese lugar? -eleve una ceja- ¿qué lugar te refieres? no te preocupes +le sonreí- no es como que fuera a gritar a todo el mundo ¡aquí está! -me rasque la cabeza- me refiero a que si estás bien del golpe de hace un momento de verdad me dolió mucho tienes la cabeza muy dura.
- Bueno… es una propiedad de los de nuestra especie, por lo general nuestro cuerpo es muy duro no cualquier cosa llega atrás pesar la piel de nuestro cuerpo.
- ¡Okay! -estaba asombrado, no sabía qué decir- ¿dime cómo quieres que te ayude? -me acerque a ella- pero antes podría decirme ¿cómo debería llamarte?
- Me llamo Hetbliz -mostrando una hermosa sonrisa- y soy un alienígena del planeta gork.
Por un momento sentí que me desmayaba cuando estaba aclarando mis ideas, entendí que en verdad era una chica alienígena, eso significa que realmente existe otro tipo de vida. Aún no sé qué rayos pasará…..
![](https://img.wattpad.com/cover/374612465-288-k32079.jpg)
ESTÁS LEYENDO
¡Estaré bien!.... Solo dame tiempo
Random¿Cuántos de nosotros decimos eso? No te preocupes, no me tienes que decir, solo te pido que no te engañes.