olvidar, ¿olvidar?.
El volvió, de vuelta, con sus ojos lindos, con aquella sonrisa que me genera miles de emociones indescriptibles. Creo no ser capaz de olvidarte, no puedo y en un cierto punto no quiero, no puedo ¿olvidar?, Olvidar nuestro primer beso, aquella primera noche de lluvia para ambos, soy tan adicta a tus besos, soy tan adicta a tu cuerpo tan fuerte y suave.
Te veía siempre, me gustaba observar hasta la mínima cosa que hacías, incluso lo cotidiano. Te ves tan lindo cuando duermes, no se si eran horas o minutos que me quedaba observándote, admirando aquella tranquilidad que poseías en esos momentos.
Esos momentos comenzaron a culminar poco a poco, porque me di cuenta que no podías ser mío de la forma en la que quiero, que seas mío, pero me toca conformarme con solo ser tu amiga.
Duele verte con alguien más, siempre son ellas y yo no. Pareciera que me quieres por la forma que me besas, me tocas y tratas, no me siento tu amiga en esos momentos.
Es como aquella canción de Conan, siempre es la otra a la que prefieres y no lo soy yo, me gustaría estar en ese lugar, pero que me veas a mí y no a otra.