Un nuevo día se asomaba y mi despertador comenzaba a sonar, resignada me levanté de la cama sin ánimo alguno, pues, este día no tenía nada especial más que seguir con la rutina diaria.
Luego de meditarlo algunos minutos decido irme a bañar para así poder estar lista para mi jornada laboral, trato de vestirme y desayunar rápido puesto que que ya estaba algo tarde.
Por fin después de una corta caminata logré llegar a mi lugar de trabajo el cual ya estaba abierto, me cambié y oficialmente comencé mi jornada laboral.
Luego de pasar por fin la hora pico llegó el momento que más esperaba, cuando Christopher venía a almorzar, el trabaja en una empresa de esta zona, o al menos eso es lo que me a dicho, la verdad me cae muy bien y creo que yo a él también
-¡Hola Lau! ¿Cómo estas?- dijo Christopher -¡Hola Chris! Yo estoy muy bien ¿Y tú?- le respondí sin mucho ánimo puesto que estaba algo cansada -¿Segura? Yo la verdad no te veo muy bien, te notas algo decaída- me dijo Chris algo preocupado, y la verdad tenía razón, aunque no quería decirle que si, -Si, estoy bien, tranquilo y gracias por la preocupación, pero, ¿Que vas a ordenar?- le dije cambiando de tema ya que realmente no quería hablar de eso.
Una vez que Chris termino de comer se me acercó con una notable cara de preocupación y me dice -Oye, la verdad no te siento muy bien, ten este es mi número llámame cuando quieras hablar- me dijo para luego darme una tarjeta con sus datos y darse la vuelta para regresar a trabajar, realmente estaba agradecida por su preocupación y su lindo gesto pero ahorita no podía pensar en eso, así que con un simple movimiento de cabeza despeje mis pensamientos y me dispuse a seguir trabajando.
En este preciso momento estaba sentada en mi cama con la tarjeta que me había dado Chris girando en mis manos, pues, estaba indecisa si llamarlo o no, realmente sentia que necesitaba hablar con el pero al mismo tiempo sentia que lo iba a molestar, una vez ya decidia le marco.
*Ring*
*Ring*
*Ring*
*Ring*
*Ring*Luego de cinco repiques creí que no contestaría hasta que -¿Alo? ¿Quien habla?- en ese preciso momento se me paralizó el corazón y me quedé muda
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¿Realmente lo merezco?
РазноеLaura es joven abandonada por la vida, pues, sus padres la dejaron en adopción apenas nació. Su vida en el orfanato tampoco era muy buena, si bien, tenía algo que comer y un techo para dormir, sus compañeros la trataban horrible debido a que era de...