Tomaba una taza de café antes de ir a trabajar, observaba con detenimiento hacía su ventana con cierto cavilo el iris de las hojas húmedas de la lluvia del día anterior, después de unos cuantos minutos, aquello que había soñado la noche anterior era algo que no podía dejar de darle vueltas, aquella voz firme y fuerte tenía una resonancia que daba giros en su cabeza, percibía que ya la habría escuchado pero... "¿Dónde?"-penso mientras ordenaba su cabello hacía atrás.
Probablemente la ansiedad de aquella entrevista lo había dejado con falta desasosiego, había tenido mil entrevistas complicadas en su vida, pero la entrevista de ayer tenía algo en particular, lo hacía sentir de una manera confusa, provocando cierta melancolía en su corazón, algo que punzaba su pecho, ese periodista sin ninguna duda generaba un miedo abrumador en su ambiente con solo mirar, era extraño pero tenía terror de algo que no existía.
-Dejare el café, no quiero más inquietud emocional por hoy.-Musito mientras tomaba las llaves de su auto a dirección al trabajo.
Al llegar a su trabajo pudo toparse con el señor Seungho quién lo miraba de manera ambigua-Vi la entrevista que
tuviste ayer, parece que ese periodista te saco de tus casillas completamente.-Comento de manera de burla.
-Ja, si es verdad fue una persona nefasta y fastidiosa, espero que Nakyum no este molesto conmigo, aún me incomoda saber que ese rumor entre nosotros siga siendo mencionado por la empresa.-Aclaro el pelirrojo fruncíendo el ceño por la molestia que sentía.
-No hace falta que se preocupe por mi pareja, él es demasiado comprensivo y sabe que realmente no hay nada entre nosotros.-
Era una certeza que Seungho y pelirrojo no tenían ciertos sentimientos románticos entre sí, pero algo si era real, Jihwa nunca podía ignorar los recuerdos de cuando eran niños, es verdad que generó un sentimientos de incertidumbre y admiración por Seungho, adoraba ver través de sus ojos carmesí en los cuales habitaba un vacío inexplicable, realmente el pelirrojo siempre tuvo ganas de conocer más allá de su vida y conocer al verdadero Seungho, sin embargo siempre había una barrera que le dificulto acercarse, pero hacía unos meses atrás Seungho conoció al famoso pintor y de repente su aura cambió al de una persona más efusiva y de un aura distinto "Muy en el fondo me alegra que tú seas feliz."-Penso el pelirrojo mirando a dirección al suelo con una leve sonrisa.
-Me siento más tranquilo ahora.-Mostro una leve sonrisa y se inclino en son de respeto, sin embargo cuando estaba a punto de marcharse Seungho lo detuvo-Espera Jihwa.-
"¿Ahora qué pasó, qué hice?"-penso el pelirrojo que solo formaba una cara de curiosidad a lo que Seungho tenía que decir.
-Olvidelo.-Finalizo y simplemente se marchó.
-Extraño-murmuro dirigiéndose directamente a su oficina donde le esperaría su manager.
-¿Puedo preguntar qué pendientes tenemos hoy?-preguntó mientras entraba a su oficina y mirando a su manager tranquilamente mientras ordenaba su escritorio.
-El gerente general quiere conocerte y que promociones a la marca.
-¿Director general?.
-Nunca nos ha dado su nombre, ni siquiera hemos visto una identificación suya, sigo sin entender porque su padre se alió con esa empresa tan incógnita, todo mundo lo conoce como Mumyeong y tu imagen le gusta como modelo de la nueva marca, así que felicitaciones.
- ¿Mumyeong? "En mi sueño yo repetía ese seudónimo..."
-¿Lee Jihwa?.
-¡Perdon! Estaba pensando, continúa.
—Como le decía esta es una de las empresas más importantes la cual llamó a tu padre porque se interesaron en tu imagen, esto dará paso a un aumento de marketing y tu niño de papá serás el foco principal de esta marca y lo más importante aún, es que hablarás con uno de los líderes ejecutivos más importantes, solo tomate unas dos fotos con él y te vas pero cuida la imágen.-Finalizo cerrando su agenda.
