Se despertó por los molestos rayos de sol que daban directamente en sus ojos, haciendo que soltara un pequeño quejido por el ardor.
Al sentir un peso sobre su brazo, volteó y solo pudo ver el hermoso y tierno rostro del chico al que amaba ,un poco tieso, no lo iba a negar, al principio se asustó al ver que no te movías y que tu pecho no se levantaba al respirar. ¿Apenas la primera noche y tan pronto falleciste?
Hasta que escuchó un pequeño ronquido de tu parte, lo que lo hizo aliviarse y reír al mismo tiempo. No iba a molestarte; no quería quitar la hermosa tranquilidad que tenías en el rostro. Tenía miedo de que te despertaras y lo miraras, ya que para él, parecía que te estaba viendo como un loco.
Pero no lo culpen, solo es un loco enamorado...
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𝙻𝚎𝚎𝚋𝚒𝚝𖤐
Escuchó un ruido de una sartén cayendo, pero solo quería dormir, así que se volteó y abrazó un bulto que eran unas simples almohadas, sin notar tu ausencia.
El verdadero susto se lo llevó cuando escuchó un grito proveniente de la cocina. En serio, no quería ganarse una queja de sus vecinos, así que, adormilado pero alterado, fue corriendo, y lo único que pudo ver era a ti, a Dori y a un pan tostado en el piso.
Seon:Mierda, no me acordaba que tenías un gato —dijiste aterrado.
A lo que solo te quedó viendo con una cara de odio. Pero no lo malinterpretes, no le gusta que interrumpan su sueño...
Pero bueno, cada uno tiene su versión, así que aquí va la tuya.
Después de batallar tanto para quitarte a Lee Know de encima, te levantaste caminando como podías, ya que la edad ya te estaba afectando. Caminaste hacia la cocina con todo el silencio del mundo para hacerte algo de comer. ¿Qué podría tener Lee en su refri?
Bueno... no era gran cosa, solo había pudín,pan, un poco de arroz y... ¿cerveza? ¿Lee tomaba? Bueno, no te importó y solo agarraste una bolsa donde había pan y lo pusiste en la tostadora. La única leche que tenía Lee en el refri era sin lactosa, aunque no te gustara, era lo único que había para tomar. Y no es que no hubieras pensado en agarrar una cerveza, pero claramente no querías terminar con dolor de cabeza.
Después de que tu pan estuvo listo, empezaste a untarlo con mermelada con la ayuda de una cuchara. Era tranquilo, aunque el completo silencio te generaba escalofríos. Sabías que solo estaban Lee Know y tú en la casa... Oh, bueno, eso pensabas hasta que escuchaste un tipo de ruido que no sabías cómo describir, hasta que sonó otra vez. Era como un tipo de cascabel. Empezaste a escuchar pasos, pensaste que era Lee Know, pero no parecía hasta que sentiste unas cosquillas en tu pie y un maullido, lo que hizo que te voltearas y te asustaras, haciendo que el pobre pan tostado con mermelada saliera volando y cayera al piso. Y la cuchara... digamos que terminó en el hermoso pelaje de Dori. Te sentiste tonto al no acordarte de los gatos de Lee Know.
