El sabor de tu sangre (kissae x Tn)

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__ al ver que el niño que etsab en el río no despegaba la mirada de ella, se preguntó si acercarse a él estuvo mal.

Al ver que la situación no cambiaría se dio la vuelta y se hecho a correr, siendo seguida por el niño.

-¡Oye! ¡Detente! - Grito el niño pelirrojo mientras la perseguía.

__ no hizo caso a sus palabras y siguió corriendo, subió bardas, cruzó calles incluso entró a casa intentando perder al niño pero al ver que la persecución continuaría dobló en un callejón y espero a que el también cruzara.

Al verlo a su lado, puso su pie en las piernas del niño lo que provocó que el cayera al suelo.

__ lo miró fijamente frunciendo su ceño, estaba por acercarse a él de no ser por la patada que el le dio que se vio obligada a tomar distancia del niño.

-¿¡Por que hiciste eso?! ¿¡Por que saliste corriendo?! ¡Pensé que querías hablar conmigo! - Dijo el niño aun en el suelo

__ no respondió y en su lugar extendio su mano dando a entender que lo ayudaría a levantarse. El chico acepto dudoso.

Ya estando de pie vio como la niña se empezó a alejar saliendo del callejón, el niño fue detrás de ella pero antes de ir muy lejos la niña lo detuvo poniendo su mano frente a él.

-¿Qué? ¿Por que te detienes? - Preguntó el niño con una sonrisa.

La niña negó con la cabeza y señaló el suelo, luego se dio la vuelta dispuesta a seguir caminando pero el niño la volvió a seguir.

-No me puedes dejar. Todavía no me compensas la gran corrida que pase persiguiendote. - Dijo el niño con una sonrisa traviesa.

__ suspiro cansada y lo tomo de la mano hasta llevarlo a algún puesto cercano donde compro la primer cosa que encontró y entregandoselo.

El niño lo acepto feliz eran unos dulces de crema que en ese mismo momento comió, bajo la antena mirada de __

Ella con curiosidad compró otros dulces y se los dio, el niño los comió también con una sonrisa, cosa que desconcierto y cautivo a la niña.

-Por cierto... Me llamó Kissae... ¿Tu como te llamas? - Pregunto aun con los dulces en la boca.

La niña saco su conejito y le dio la vuelta, en el había una etiqueta donde marcaba su nombre. El niño al ver su acción pensó que __ era muda.

Cuando Kissae comió todos los dulces que le había dado __ ella estaba por irse.

-¿Voy a volver a verte?

La niña no le respondió y siguió caminando, al día siguiente se acercó a una tienda de ropa donde encontró una tela corta qué le gustó. Era similar a una bufanda solo que esta era completamente redonda y un poco grande, aún así la compro de un color vino que le fascinó.

En ese momento se la puso y siguió explorando el lugar, como el día anterior ya había visto la mayoría del los sitios empezó a conciderar volver con su padre adoptivo. De no ser por el niño que despertó su curiosidad.

La niña se preguntaba ¿Cómo es que alguien pude disfrutar de esa manera? ¿Comer con tanta alegría? ¿O por que sus ojos brillaban al comerlos?

Asi con esas dudas en mente, __ volvió al río con curiosidad de saber si el niño volvería a ese lugar... Y si, así estaba, pero había algo diferente.

A lo lejos __ pudo divisar bien los brazos de Kissae, los cuales estaban lastimados, además de que parecía tener el pelo más largo.

Con más curiosidad se acercó a él otra vez, pero esta vez sin llegar a tocarlo, solo se paró a su lado. Kissae al verla sonrió y la invito a sentarse.

__ obedeció pero se sentó un poco lejos de él para mantener distancia. Ninguno decía nada hasta que fue el niño el que hablo.

-Quisiera... Irme lejos de aquí... Irme y nunca volver...

__ al no comprender sus palabras señalo los brazos de Kissae.

-En parte es por esto pero... Hay otras razones...

La voz del niño se oía diferente. Había tristeza en su voz pero también era aguda... Semejaba a la de una mujer.

Continuaron en silencio, pero en un momento __ se puso de pie y le indicó que no se fuera de ahí. Pasados unos minutos volvió con una bebida y se la dio a Kissae.

El sonrió, nostálgico y la acepto. __ sentía curiosidad del porque con solo una bebida puso mejorar el estado del niño. Era algo que ella no comprendía y ansiaba por entender...

Los días pasaron pero la situación no mejoraba. __ no podía entender el comportamiento de Kissae y Kissae cada día volvía peor, lastimado por todos lados.

Al penúltimo día __ se volvió a topar con Kissae en el sitio acordado, ir al río a verse se volvió una costumbre entre los dos. Los dos estaban viendo el atardecer sentados en el césped.

-Sabes... Este es el mejor momento del día... Cuando puedo estar contigo... Eres mi primera amiga

__ volvió la mirada a Kissae con duda... ¿Amiga? ¿Qué es una amiga?... A pesar de todo el tiempo que pasaron __ nunca le dijo una palabra a Kissae... ¿La razón? Es que ni siquiera ella sabía por que no hablo con el.

-¿Qué tal si hacemos una promesa?... Si a alguno de los dos le llega a pasar algo al otro... Prometemos que el otro va a buscarlo... En este mundo... Donde el acesinato en un derecho... No podemos darnos el lujo de vivir despreocupadamente... Hay que prometerlo.

Kissae estiro su dedo meñique hacia __, ella sin comprender bien la situación hizo lo mismo que el. Así ambos estrecharon sus dedos meñique formando una promesa que perduraria hasta años después...

Al día siguiente no se presentó en el río, ni siquiera se despidió de Kissae ya que al final su propósito de pasar tiempo con el era entender sus reacciones. Cosa que no logro.

Tomo sus cosas y se fue del distrito no sin antes informar a Reiros. Que mando un vehículo por ella.

En ese mismo momento, Kissae, que se encontraba en el río en una condición crítica pues estaba a punto de perder la conciencia debido a los golpes que tenía, esperaba paciente a su única amiga... Sin saber que ya no la volvería a ver...