🌈 Destinados🌈

-∆ ❤️one shot ❤️ ∆ -

Damian Wayne nunca se  había permitido ser débil.

Como hijo de Bruce Wayne, había sido entrenado desde una edad temprana para ser fuerte, calculador y autosuficiente. Pero había un aspecto de sí mismo que siempre había rechazado: ser un Omega.

Para Damian, la idea de ser vulnerable o dependiente de alguien era inaceptable. Por eso, había mantenido su naturaleza oculta, incluso de aquellos más cercanos a él.

Jonathan Kent, por otro lado, había aceptado su rol de Alfa con naturalidad.

A diferencia de Damian, Jon no veía su naturaleza como una debilidad o una responsabilidad abrumadora. Era simplemente una parte de él, algo que había aprendido a controlar gracias a la guía de su padre, Superman.

A medida que los años pasaron, su amistad se había fortalecido, con aventuras y desafíos que los unían más allá de cualquier diferencia. Sin embargo, lo que ninguno de los dos se atrevía a admitir era la creciente tensión que existía entre ellos, una tensión que iba más allá de simples diferencias o desacuerdos.

Una noche, durante una misión en Gotham, esa tensión finalmente alcanzó su punto de ebullición.

Habían estado luchando contra una nueva amenaza que había surgido en la ciudad, y después de una larga y agotadora batalla, se encontraron en la Baticueva, curandose las heridas.
Damian estaba tenso, más de lo habitual.
Jon, siempre perceptivo, lo notó.

—¿Estás bien, Damian? —
preguntó, dando un paso hacia su amigo.

Damian lo miró con una intensidad que Jon no había visto antes. Algo en esos ojos verdes brillaba con una mezcla de desafío y... ¿miedo?

—Estoy bien, Kent. No necesito que me cuides—respondió Damian con su usual tono cortante.

Pero Jon no retrocedió. Sabía que algo estaba mal, y no se iría hasta descubrirlo.

—Siempre has sido fuerte, Damian. Pero sé que hay algo que estás ocultando. —
Jon dio otro paso adelante, acercándose más a su amigo

—Puedes confiar en mí.—

Damian apretó los puños, su cuerpo temblando ligeramente. Sabía que Jon era un Alfa, y que su cuerpo estaba reaccionando a su presencia de una manera que no podía controlar.

Había pasado demasiado tiempo ignorando sus instintos, pero ahora, frente a Jon, esos muros se estaban desmoronándose.

—Jon, yo...—Las palabras se atoraron en su garganta

Y antes de que pudiera detenerse, sintió el calor de la mano de Jon en su hombro, un toque que envió un escalofrío por todo su cuerpo.

Jonathan sintió el temblor bajo su mano y, de repente, todo encajó. Damian era un Omega, y estaba luchando contra sí mismo para no sucumbir a su naturaleza.

La realización golpeó a Jon con fuerza, y aunque quería respetar los límites de Damian, no podía ignorar la atracción que había sentido por él desde hacía tiempo.

—No tienes que luchar contra esto —susurró Jon, su voz suave y tranquilizadora.

Damian lo miró, sus ojos ahora llenos de una vulnerabilidad que rara vez mostraba.
Sabía que Jon tenía razón, pero el miedo a lo desconocido y a lo que significaría ceder era abrumador.

—¿Qué pasa si no soy lo suficientemente fuerte?—preguntó Damian, su voz apenas un murmullo.

Jon se acercó más, sus cuerpos casi tocándose.

—Eres el más fuerte que conozco, Damian. Y no importa lo que seas, Alfa, Beta u Omega, siempre estaré a tu lado.—

Las palabras de Jon rompieron la última barrera que Damian había construido alrededor de su corazón.

En ese momento, ya no pudo resistirse más. Dejó que sus instintos tomaran el control, y se acercó a Jon, envolviéndolo en un abrazo que fue correspondido de inmediato.Jonathan lo sostuvo con fuerza, sintiendo el latido acelerado de Damian contra su pecho.

Sabía que esto cambiaría todo entre ellos, pero también sabía que era lo que ambos necesitaban. Habían sido destinados a estar juntos, y ahora que ese lazo finalmente se había formado, nada podría separarlos.

En la oscuridad de la Baticueva, rodeados por las sombras de Gotham, Jon y Damian encontraron un nuevo tipo de fortaleza, uno que solo podía nacer del amor y la aceptación mutua. Y así, el destino de dos jóvenes héroes se entrelazó de una manera que ni siquiera el tiempo podría deshacer

.Fin.