El extraño

6

hay cosas que simplemente no se pueden explicar, otras quedan en silencio sin resolver.

Llegué a casa cansado y asustado, estaba sucio, lleno de lodo y hojas secas, con rasguños en mi mano por las plantas. Me sentía incompleto por aquello que miré, y aterrado.
Me metí al baño y me quité la ropa, quedé desnudo y abrí la regadera, me miré al espejo, mi piel con rasguños y mis ojos cansados y irritados por llorar todo el tiempo.
Las personas que están más destruidas pueden fingir la sonrisa más feliz, y al estar solos, solo se rompen como el cristal.
Me metí a bañar, miraba abajo y el agua pasaba por mi cuerpo, mezclando las lágrimas en el agua, se me hace estúpido llorar cuando pude salvarlo. Ahora ya no está quién venía a verme para decirme cosas sin sentido.
Me senté en el suelo del baño mientras el agua se llevaba mis lágrimas y la suciedad del bosque.
No puedo salvar a todo el mundo, por más que eso quisiera hacer.
salí de bañar y me puse una toalla para no salir desnudo a la sala, me metí a mi cuarto y me tapé con las sábanas para no verme desnudo, no ahora.
Las flores en el jarrito pequeño cerca de la puerta ya estaban secas, con los pétalos colgando y otros en el suelo.
Algunas personas se quedan rotas, otras se reconstruyen dejando todos los filos hacia afuera.
Solo quería ser felíz, pero no aquí.
Cerré los ojos, y me dejé llevar, sentir, algo que no está aquí.
Sin drogas, ni alcohol, sin vida.

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