Entre mi realidad, y la de todos los demas

Sangre y calor

A las 5 mi mamá llega a despertarme
-Despierta bebé!
-No quiero- Estaba demasiado cansada para despertarme y entrar a una nueva escuela y pasar por todo ese rollo, además cuando hay una pesadilla es seguro que no será un buen día.
-Tienes que ir a la escuela, es apenas tu pimer día, no te hecharas para atrás
Ella tiene razon, me levantó con todo el animo posible. La cabeza me punza y los ojos me duelen todo es más obscuro de lo normal.
Me meto a bañar la luz esta parpadeando demasiado y es más amarilla de lo que acostumbró ver diario, el baño esta mucho más gastado y parece haber sarro en todos lados, pero lo ignoró totalmente... Algo no anda bien.
Dentro de la regadera, abro la llave y el agua, más que caer encima de mi, me ataca, esta demasiado caliente, giro ha manilla del agua fría, pero sólo consigo más agua que quema mi piel, cada vez más y más caliente, intento salir de la regadera pero es imposible, algo me jala u obliga a quedarme en el centro. Esto me esta asustando. Trato de cerrar la regadera, totalmente inutil, el agua esta desaciendo mi piel sin piedad; comienzo a gritar por causa del dolor, esto es horrible.
-Auxilio- grite desesperadamente en un grito ahogado y con falta de aire. Escucho que la puerta se comienza a azotar, la luz se apaga totalmente, escucho mis latidos, y el olor a azufre inunda la habitación, no logro ver nada, el agua me hace gritar debajo de ella, pedazos de piel ya casi no son parte de mi, no puedo pensar casi en nada, más que en el dolor que siento; caigo incada sobre el lago de infierno hirviendo; la puerta sigue azotándose desesperadamente y hace que me altere demasiado, comienzo a gritar muy fuerte esperando a que alguien venga a ayudarme, quiero pensar que esto no esta pasando, el vapor me sofoca y el agua desprende mi piel enrojecida, aunque ciomienzo a creer que esto ya no es agua, grito cada vez más desgarradora mente y de un momento a otro... Hay algo en frente de mi?
Siento que alguien esta justo frente a mi, pero no logró ver nada. Mis oídos se están tapando y lo que escucho después de que el agua quede muda, es una risita macbra que viene de frente a mi seguido de un grito que no pude controlar, fue casi instintintivo, un grito que acabo con el delicado contucto de mi garganta. Esto no fue buena idea... Esta cosa me permitió desgarrarme la garganta por dentro, eso sabía que nadie escucharía; y ahora, sus garras están sobre mi cuello intentando abrirlo, no logro ver a nadie, la puerta sigue sonando como si alguien aporreara sobre ella al otro lado. Me intento hacer a un rincón pero esta maldita cosa me tiene tomada por el cueyo, y sus dos pulgares se van enterrando más y más en un sólo punto, el grito ya no me sale, pero siento que los ojos se me saldrán, sus garras entran en mi cuello haciendo un hoyo del tamaño de dos pulgares el dolor es insoportable, sus dedos y garras están clavados en mi, no me soltara hasta haberme matado y que mis ojos ya no estén en su lugar. La sangre tibia comienza correr por mi cuerpo mientras intento hilar un grito de auxilio... Nada.
El agua ha desecho casi toda mi piel y me arde todo, este ser esta jalando mi faringe de adentro hacia afuera, siento claro como mi lengua y la piel de mi garganta se jalan desde mi boca y alguien sigue azotando la maldita puerta en un inútil intento de entrar. Ya no soporto, que me mate de una vez por todas! En definitiva, después de este pensamiento, ya no solo el agua es muda, todo lo es cada ves más y así como así, caigo al piso, lleno de sangre caliente y olor a azufre con media garganta colgando de mi cuello... Me voy...

Que pasa? Estoy regresando?
<Carajo!> pienso para mis adentros.
Justo antes de estar inconsciente la luz se prende ye doy cuenta que estoy en una bodega vieja y oxidada con una gran tubería (tambien oxidada) de agua caliente saliendo... No hay puertas cerca pero escuchó mi corazón, muy rápido cada vez más hasta que reaccionó como despertando de una pesadilla... La regadera sobre mi, agua fría, como me gusta si cabe decir, una cicatriz leve en el cuello y sangre en las manos y pies... mi madre llama a la puerta gritando
-Cariño se hace tarde!!!
Que extraño... Yo no recuerdo que la regadera estuviera tan oxidada
-Claro mamá, ya salgo!!
Nunca pude ver quien manipulaba mi faringe de aquella forma tan sadica, pero si se que me dejó ahí tirada y sangrando, lo único que queria de mi era mi sufrimiento... Así empezó mi día y presentía que esto solo era el principio...
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Hola! Es mi primera creación, no se si vaya bien pero pls voten y comenten, si hay algo que les gustaría ver o leer aquí o en otra historia pls. Gracias besos.